Han sido presidentes del Ecuador y han tenido un apego especial por un equipo de fútbol y eso ha llevado a que le den su apoyo a sus equipos favoritos. No hablamos de que vayan al estadio y griten, sino de una ayuda monetaria en diferentes vías.

Siempre queda en el ambiente “el apoyo presidencial” recibido. Y hay tres casos definidos de planteles: Barcelona, Emelec y Aucas que han tenido a sus hinchas en la presidencia de la República.

LOS 200 MILLONES

Que los clubes tengan sus escenarios propios en Ecuador comenzó con la construcción del estadio de Barcelona. Era el gobierno del presidente León Febres-Cordero (1985) y el equipo amarillo no tenía dinero, por lo que el Gobierno Nacional entregó 200 millones de sucres, que en ese tiempo eran unos 3 millones de dólares, cifra con la que se dio inicio al ‘templo’, como le dicen sus hinchas al Monumental.

Pese a la inversión, el mencionado billete no alcanzaba, de ahí que el Congreso Nacional, con el Ab. Jaime Nebot que en ese entonces era diputado, gestionó 700 millones más para poder terminar el escenario deportivo. El 27 de diciembre de 1987, el presidente León cortó finalmente la cinta en la inauguración.

MORENO Y EL PAPÁ

El mandatario Lenín Moreno era hincha de Aucas, iba al estadio y todo, pero un día, cuando era vicepresidente, Ramiro Gordón, administrador y gerente del equipo, dijo: “Hablamos con el señor Lenín Moreno, quien nos dijo que se está moviendo para apoyar en el tema comercial. Él es un amigo que está puesto la camiseta de Aucas”.

Con el paso de los meses, Aucas recibió el respaldo publicitario de empresas del Estado y cuando fue presidente del Ecuador, el equipo oriental armó un buen plantel e hinchas de otros elencos hasta compararon la camiseta del Papá con las del fútbol mexicano, debido a la cantidad de publicidad que tenía.

En 2017, la Contraloría General de Estado dio a conocer que la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT) pagó por servicios publicitarios que no solicitó y los beneficiados fueron Barcelona y Aucas.

CORREA Y EMELEC

El amor de Rafael Correa por Emelec fue de frente cuando era presidente de la nación. Hubo el respaldo de empresas gigantes que tenían relación con el estadio, como PDVSA de Venezuela o Banco del Pacífico, y hasta se determinó que el Capwell tenga el nombre de la entidad crediticia.

Lo raro de todo esto es que en la actualidad no exista un mandatario del Ecuador que sea fanático de Macará, Delfín, Deportivo Cuenca o el Orense.