Plinio Torres no es familiar de Vicente ‘El Ministro’ Lecaro. A pesar de eso, está golpeado por la partida del último integrante de la ‘Cortina de Hierro’ de Barcelona y la selección de Ecuador, entre 1963 y 1971, a quien conoció en las 2 facetas que destacó: como jugador y formador de futuras promesas del balompié ecuatoriano.

Lecaro junto a los también fallecidos Luciano Macías (en 2022), Alfonso Quijano (en 2021) y Miguel Bustamante (en 2012) destacaron por su solidez defensiva, época en la que los equipos preferían atacar que defender, pero El Ministro sobresalía por su temperamento, tranquilidad y calidad para manejar la pelota, recordó Plinio, de 65 años.

“Cuando iba al estadio más me fijaba en Lecaro porque jugaba bien, era alguien distinto, de esos jugadores que tranquilamente hubiesen podido llegar a los mejores clubes del mundo. En la Hazaña de la Plata, en el 71, no nos empataron porque él hizo un partidazo y sacó un gol en el último minuto. En la selección también daba esos espectáculos”, recordó Torres mientras secaba las lágrimas en su rostro.

Entre 1954 y 1971, a excepción de la temporada de 1962 porque jugó en Emelec, Vicente Lecaro disputó aproximadamente 300 partidos con Barcelona y ganó 4 veces el torneo ecuatoriano (1960, 1963, 1966 y 1970) y en 4 ocasiones el Campeonato de Guayaquil (1961, 1963, 1965 y 1967). Luego, tras su retiro, en 1972, formó a varios jugadores. A Plinio lo dirigió en Panamá SC.

“En la cancha se lo veía aguerrido, pero como técnico era un amor. Se tomaba el tiempo suficiente y nos enseñaba a jugar a cada uno, sin importar que éramos como 30 jugadores. Nos trataba como si fuéramos sus hijos, nos abrazaba y aconsejaba. Cuando él hablaba todos poníamos atención, porque decía cosas interesantes que te ayudaban a mejorar”, acotó Plinio Torres.

Vicente Lecaro falleció a sus 87 años. Sus buenas actuaciones quedarán en el recuerdo de los hinchas que disfrutaron su fútbol. El jueves 24 de agosto de 2023 lo velaron en las salas de velaciones del Cementerio Patrimonial de Guayaquil, en el centro de la ciudad, y a las 17:00 estaba programado su entierro.