La cancha del arenal en la Isla Trinitaria, al sur de Guayaquil, fue el primer “Maracaná” de Adonis Preciado. Eso lo cuenta Junior Ayoví, su entrenador desde los 14 hasta 20 años.

Fue él el que encaminó al actual jugador de Barcelona. Si bien el entrenador sigue trabajando en la cancha que ahora es de césped sintético, hoy recuerda que los amigos de la cooperativa Independencia 1, mejor conocida como Cenepa, le dijeron que había un pelado que pintaba para centrodelantero y que hacía muchos goles. Eso motivó para que el ‘profe’ le haga la invitación.

Así nació una amistad que hasta ahora la disfrutan. La última vez que fue Adonis le obsequió tres pares de zapatos para los chicos que entrenan.

- ¿Adonis en qué puesto comenzó?

Siempre fue centrodelantero, es por eso que no me asombró cuando hizo el gol, porque lo conozco. En Barcelona juega por fuera, por eso siempre le digo que si juega como nueve seguro que sería el goleador.

- ¿Lo tuvo seis años, pero se dio a conocer en Santo Domingo y luego en Mushuc Runa?

Es una historia larga de esas que siempre pasan. Al primer equipo fue a entrenar, era el Guayaquil Sport, estuvo poco tiempo y un día le dijeron que ya no vaya, porque no tenía condiciones, fue triste, porque estaba ilusionado con poder jugar. Pero Dios sabe como todo lo tiene planeado.

- ¿Pero nunca probó en los del Astillero?

Adonis estuvo en la reserva de Emelec y pasó lo mismo, un día le expresaron que le faltaba condiciones para jugar y se retiró. Entonces se dio lo de ir a jugar primero al equipo Guayacán, de Ventanas, luego a Santo Domingo de los Tsáchilas y pasó a Mushuc Runa, recuerdo que cuando se dio eso salieron varios empresarios que se creían dueños de su pase. Ahora lo tenemos en Barcelona, pero pasó por muchos años de sacrificio y lo bueno es que nunca se ha olvidado de la cancha donde comenzó ni de los amigos de su querida Trinitaria.

- ¿Cuál es su mejor virtud?

Desde los 14 hasta los 20 años que entrenó con nosotros siempre era un jugador que peleaba todos los balones, lo entregaba todo en la cancha. Estoy seguro que está listo para mostrar todo su juego.