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8M: Camila Andrade y Daniela Vallejo enseñan a más mujeres a defenderse con Jiu Jitsu
Las agresiones y abusos a mujeres suceden a diario en Ecuador, es por eso que Camila Andrade y Daniela Vallejo enseñan Jiu Jitsu como herramienta de defensa personal, para así empoderarlas con seguridad.
"Es mejor saber defenderte y no necesitar hacerlo, que ser víctima de una agresión y no saber cómo actuar", con esa frase, Camila Andrade refuerza su argumento de que todas las mujeres deberían aprender Jiu Jitsu Brasileño. Ella tiene 22 años y entrena este deporte desde hace 8, y aunque ha sido múltiple veces campeona nacional e internacional, su misión no es seguir coleccionando medallas, solo quiere empoderar a más como ella y regalarles una herramienta que les brinde seguridad.
'Cami', como lo conoce toda la comunidad jiujitsera del Ecuador, se ha ganado el respeto y la admiración de todos, no solo por ser una destacada atleta a nivel competitivo, sino por su entrega y pasión para hacer de este mundo, un lugar más seguro para las mujeres. Y es que en el universo perfecto, nadie debería tener que preocuparse por defenderse de otro ser humano, sin embargo, esto es solo una utopía, los peligros son reales y cada vez mayores.
Para la guayaquileña, el abuso no es algo desconocido, al contrario, su inicio en el Jiu Jitsu se da porque durante su etapa de colegio sufrió 'bullying'. Fue su madre quien le dijo que debía aprender a defenderse y la inscribió en una academia, sin imaginar que ella se enamoraría de este deporte y lo convertiría en su estilo de vida y bandera de lucha.
MENINAS SISTERHOOD
Cuando 'Cami' empezó en el Jiu Jitsu, era solo una niña de 14 años y en Ecuador habían muy pocas mujeres practicando este deporte. Desde el principio le tocó adaptarse a entrenar y luchar con atletas hombres, que la doblaban en tamaño y también eran más fuertes que ella, sin embargo, nunca pensó en renunciar. Al contrario, ella tomó la misión de que la comunidad femenina crezca cada vez más.
Para agrupar a todas las mujeres jiujitseras del Ecuador y que así pudieran compartir entrenamientos juntas, sin importar a la academia que representaran, nació 'Meninas Sisterhood'. La creación de este espacio de interacción, impulsó el crecimiento femenino en este deporte, porque aquellas que no lo intentaban por miedo a lastimarse al practicarlo con hombres, encontraron una comunidad donde podían tener su primer acercamiento con este arte marcial.
Actualmente, aparte de liderar el desarrollo del Jiu Jitsu femenino en el país, Camila Andrade también es profesora en el Team Predador, donde tiene un horario dedicado exclusivamente a mujeres. Además, brinda talleres de defensa personal y ha colaborado con algunas instituciones para masificar la práctica de este deporte en niñas y adolescentes.
CAMPEONA MUNDIAL QUE LUCHA CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO
Daniela Vallejo es una laureada atleta de Jiu Jitsu. En diciembre de 2022, se coronó por dos ocasiones campeona mundial en la Liga Rusa ‘Absolute Championhip of Brazilian Jiu-Jitsu’, logro que fue aplaudido por la comunidad de este deporte en Ecuador. A pesar de estar enfocada en su desarrollo como atleta, también trabaja por impulsar a que más mujeres aprendan cómo defenderse.
Antes de ser campeona mundial de Jiu Jitsu , cuando aún no practicaba ningún arte marcial, Daniela también fue víctima de agresión física. Su principal objetivo es que las mujeres que han sufrido abuso, puedan volver a sentirse seguras, recuperen su confianza y mejoren su autoestima.
Con talleres de defensa personal, abiertos y gratuitos, incentiva en la ciudad de Quito, la practica de este arte marcial, que fue creado para que una persona pequeña y débil, pueda defenderse de un agresor más grande y fuerte, utilizando las técnicas adecuadas. Helio Gracie, creador del Jiu Jitsu Brasileño dijo alguna vez "Dios hizo hombres grandes y débiles, el Jiu Jitsu los igualó".
Ninguna mujer debería vivir con miedo, pero ante los peligros de la sociedad actual, es mejor estar preparada para actuar. Camila Andrade y Daniela Vallejo, sin duda contribuirán a que cada vez menos mujeres necesiten ser auxiliadas.