A Pamela le aterra la idea de que su agresor vuelva a las calles, ande libre y la mate. Durante los seis años que compartieron juntos, matarla era una de las tantas amenazas que recibía por parte de él, otras eran matar a su familia, a su mamá...

Este es el testimonio de una valiente mujer que soportó años de maltrato, en silencio, sin poder decirle al mundo que era parte de las estadísticas de violencia de género, por el terror que le infundó su ex pareja.

Pamela y su esposo tuvieron una relación de noviazgo respetuosa y amorosa, describe. Después de un año y ocho meses ella se mudó con él.

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La primera vez que (su esposo) le levantó la mano, y marcó lo que sería la vida de violencia que llevó, fue apenas dos semanas después de haberse mudado juntos, al rehusarse a asistir a un evento social con él.

Después de esa primera vez, y en su intento por darse a respetar, encontró solo más violencia y descubrió entonces que su pareja no era el hombre cariñoso ni preocupado que se pintó en los veinte meses de noviazgo. El temor la envolvió después de los maltratos y las amenazas.

Las torturas fueron parte de su día a día: golpes, corriente, abuso sexual.

Ella, aun con el acusado con prisión preventiva, teme que pueda cumplir con las amenazas.

A inicios de este mes de noviembre, cuando se conmemora el Día de la No Violencia a la Mujer (25), y como por cosas del destino, ella pudo salir del cautiverio de silencio y temor al que su agresor la tuvo sometida; sin embargo, el terror está latente.

Este caso se encuentra en proceso judicial; por ello extra.ec ha omitido nombres completos y detalles de los involucrados. Lea la historia de esta joven en la versión impresa de Diario Extra de este miércoles 20 de noviembre.