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Buena Vida
Cuatro acciones que pueden contribuir a que mejore tu suerte
Aunque puede ser un pregunta sin respuesta, es algo real, unas personas si son más afortunadas o con suerte que otras. ¿Cómo lo logran? Así te suene un poco ilógico, todo parece estar en la mente y en tu forma de ser.
¿Por qué nos va mal o por qué nos va bien en nuestras vidas? Ser ‘salado’ o ‘suertudo’ no tiene una respuesta certera o comprobada, sin embargo cada quien tendrá sus propios métodos para alcanzar esa tan preciada suerte.
Quizás habrás escuchado las técnicas más populares o ‘efectivas’ tales como cruzar los dedos, una pata de conejo, o un trébol de cuatro hojas, pero verdaderamente, ¿tendrá uno de estos objetos ese ‘poder’ mágico que lleve suerte a tu vida?
Aunque puede ser un pregunta sin respuesta, es algo real, unas personas si son más afortunadas o con suerte que otras. ¿Cómo lo logran? Así te suene un poco ilógico, todo parece estar en la mente y en tu forma de ser.
A esa conclusión llegó el psicólogo Richard Wiseman, citado por la BBC, que realizó un estudio del papel de la suerte y el impacto que tiene en la vida de las personas.
En esta investigación científica, Wiseman analizó lo que diferencia a las personas ‘con suerte’ y a los ‘desafortunados’.
El resultado fue que se trata de algo sencillo: de cómo pensamos y nos comportamos. “La gente crea su propia buena y mala suerte”, asegura el psicólogo.
Los ‘suertudos’, según esta investigación, logran estas situaciones positivas y a su favor, gracias a acciones que dependen en gran parte de ser decidido.
A continuación toma nota si quieres seguir la senda de los ‘afortunados’:
Toma las nuevas oportunidades
Una persona ‘afortunada’ tiene la capacidad de detectar y aprovechar las oportunidades cuando llega momento de decidir.
Por lo general los ‘suertudos’ no temen tomar nuevos retos y caminos en su vida.
Los ‘salados’, contrario a esto, viven acostumbrados a la rutina y pese a que tengan oportunidades de cambio, temen a dar un giro a su vida.
Hazle caso a tu instinto
El instinto no es solo animal, también está presente en los humanos, sobre todo en los afortunados.
Ese impulso natural les permite lanzarse a los nuevos retos con la convicción y buenas ‘vibras’ de que lograrán su objetivo.
Mientras a aquellos con mala suerte, “les lleva más tiempo decidir las cosas y, a menudo, su forma de pensar no es muy útil”, dice Wiseman.
Su manera de pensarse mucho las cosas y ser analíticas por naturaleza les termina jugando en contra.
“Todo va a estar bien”
El optimismo es una característica fundamental de los ‘suertudos’. Esto le genera una fe de que lograrán el éxito en lo que se proponen o deciden hacer.
“Esperan que las cosas salgan bien, y esa convicción se convierte en una profecía autocumplida”, afirma Wiseman.
Aunque no siempre salgan las cosas bien, al final esa forma de pensar les permite levantarse de las ‘caídas’ y continuar adelante.
Ellos suelen ser quienes atraen a otros y podrían considerarse líderes a donde vayan.
Positivo ante todo
Estar positivo es un estado mental clave en el camino hacia la suerte.
Los afortunados, pese a que les ocurra algo malo, no se dejan ‘tumbar’ por la situación, sino más bien aprenden de ellas y se quedan con lo positivo.
En cambio los ‘salados’ ven todo como negativo, hasta lo más mínimo, y terminan visualizando un futuro complicado, absteniendose al cambio.
A estos consejos, Wiseman agrega uno extra que te sonará ‘tonto’: un “diario de la suerte”.
“Apunta lo más positivo y afortunado que haya sucedido hoy, sin importar lo trivial que sea”, explica.
El psicólogo señala que este librito puede contribuirte a reducir la negatividad, ayudar a centrarte en los aspectos positivos de la vida y además construir una actitud de resistencia frente a la adversidad.