La llegada de la quincena o el fin de mes pone de buen humor a la persona que trabaja, pero a su vez, el bolsillo es el que se resiente cuando de pagar las deudas se trata.

“No me alcanza el sueldo”, “¿cómo pago esta deuda?”, “¿cuándo me metí en esto?” o ¿por qué no tengo plata?” son algunas de las frases y preguntas que sin duda te has hecho cuando te sientes ahorcado por las deudas y no sabes cómo pagar.

EXTRA consultó a los ingenieros en Administración de Empresas Daniel Vásconez y Gino Yu Villao, quienes concuerdan que en Ecuador hay muy poca cultura de ahorro y de planificación financiera, aspectos que hacen que el flujo de la economía familiar y personal sea favorable para solventar gastos mensuales.

“Para que en Ecuador haya una verdadera cultura financiera todos debemos saber un poco de contabilidad y, a su vez, es de vital importancia identificar nuestros ingresos y gastos. Ya detectados, podemos analizar cuál es la fuga por donde el dinero se escapa y hay que cerrarla inmediatamente”, explica Vásconez, quien advierte que con un conocimiento mínimo de finanzas y administración no solo que se pueden evitar las deudas, si no también es posible ahorrar.

Además, la sociedad de consumo es una esfera invisible que logra captar la atención e impulsa a comprar cosas innecesarias. Sin embargo, los expertos aseguran que el mercado tiene la “intención maligna para enganchar a alguien a comprar objetos y nos obliga a salir de nuestro presupuesto”. El ingeniero Yu explica que hacer un budgeting (presupuesto) es necesario porque permite realizar una lista de prioridades.

Así, cuando el llegue el income (ingreso), una persona conocerá qué se direcciona a qué y, en el último caso, qué podría esperar.

“Nosotros tenemos más gastos que ingresos. De tal manera que debemos ejemplificar nuestros gastos por secciones fáciles. Hay gastos fijos que toda la vida van a estar, mientras que los variables son los que dependerán de nosotros. Y son estos los que nos llevan a la ruina financiera”, explica Yu.

Los expertos manifiestan también que la disciplina es una constante que debe permanecer fija para que el dinero alcance. Ambos creen que, sin esta virtud, es casi imposible resolver nuestros problemas monetarios, mucho menos ahorrar.

“La disciplina es un paso que debe estar presente en este proceso, porque de nada sirve hacer un presupuesto bonito y cuando me llega la mensualidad estar en las mismas”. Agregan que esto sería un problema de impulsos y no de finanzas.

Muchas veces, cuando la persona percibe un ingreso básico limita su compra. Pero cuando el ingreso aumenta, las personas tienden a buscar gastos acordes a sus cortes mensuales. “Esto es como la ley de la oferta y la demanda. Mientras más oferta hay en el mercado, más consumidores existen”, dice Vásconez, luego de preguntarse en voz alta por qué un ecuatoriano se queja por no tener plata pero al mismo tiempo se mete en deudas.

Por ende, los ingenieros aconsejan que una persona debe realizar una lista de ingresos y gastos mensuales para llevar un control y poder compararlos. “La mayoría de los ecuatorianos somos vanidosos. Pero las mujeres tienen el 70% del pastel”, aclara Yu, ya que el mercado local de la moda está destinado al consumo femenino.

Pero, ¿qué beneficios saco de esto?

Uno de los beneficios que deja el realizar un presupuesto de ingresos y gastos es la salud mental. Porque cuando surge un problema económico nos ataca el estrés, la desesperación por pagar deudas atrasadas, y nos mata la ansiedad.

“Creo que todos hemos pasado por una crisis financiera. La crisis se puede solucionar, siempre y cuando sepamos dónde fue el dinero; si no conocemos en qué lo gastamos, nos va a causar mucha confusión y malos ratos”, narra Vásconez.

Otro beneficio es aprender a controlar el sueldo. Hay deudas como el transporte, la renta y servicios básicos que son netamente fijos que la persona debe pagar. La cuestión está en variables como alimentación, vestimenta y gustitos.

“Estos costos pueden resolverse, no digo que es fácil manejar su presupuesto a la primera, pero sí es un gran paso para conocer por qué no me alcanza la plata.

Finalmente, el entrevistado recomendó lo siguiente:

—Cultura financiera

—Detectar ingresos y egresos

—Hacer una lista de prioridades

—Realizar un presupuesto

—Ser disciplinado con tus deudas

—No ser comprador impulsivo