Empieza un nuevo año y con él surgen propósitos y metas por cumplir. Aunque fortalecer la seguridad y autoestima nos concierne a todos, independientemente del sexo o género, las mujeres han adoptado un concepto que resalta sus cualidades positivas.

Las mujeres de alto valor, un concepto originado en conversaciones en redes sociales y ahora reflejado en libros y manuales, conforman un prospecto de fémina que cuida de su cuerpo, su imagen, su salud emocional, y que además desarrolla plena confianza en sí misma.

Conceptos

Varios conceptos claves determinan la forma de pensar de una mujer que se considera a sí misma de alto valor:

* Autoestima y confianza: No depende de la aprobación de los demás para sentirse bien consigo misma. 

* Independencia emocional. Tiene intereses, metas y actividades que realiza por su cuenta.

* Respeto propio y por los demás. Sabe establecer límites saludables en sus relaciones interpersonales.

* Comunicación afectiva. Expresa pensamientos y sentimientos con claridad y respeto.

* Inteligencia emocional. Junto con su autenticidad, crecimiento personal y salud emocional y física.

“Una mujer con mentalidad de diosa reconoce que es afortunada, también conocido como ‘lucky girl syndrome’, este término implica que ella cree que todo en su vida siempre juega a su favor, incluso cuando enfrenta problemas o dificultades, ya que entiende que son bendiciones disfrazadas”, explica Marta Salerno, experta en belleza y desarrollo personal.

Asegura que este tipo de personalidad es consciente de su poder y de la atractiva energía que irradia. “Su presencia atrae a todos, generando un deseo natural de estar cerca, hablar con ella, o incluso hacerle favores”, comenta.

La mejor versión

A pesar de todo, es fundamental subrayar que la idea de ‘alto valor’ no tiene como objetivo establecer ideales de perfección femenina. Más bien se trata de esforzarse por ser la mejor versión de una misma y aportar positivamente al entorno que nos rodea.

“Destaca por enfrentar sus debilidades con madurez y constructividad. Se toma el tiempo para reflexionar sobre sí misma, identificar áreas de mejora y reconocer honestamente sus puntos débiles”, detalla Salerno.

Este pensamiento ha logrado vincular a miles de mujeres en todo el mundo que buscan conectar con su energía femenina y elevarla a su máxima potencia. Cielo Argüello, ciudadana local, dice que su vida y las relaciones con los demás mejoraron progresivamente cuando empezó a instruirse en el cuidado hacia ella misma.

“Cuando iba al colegio, era una chica desesperada por validación externa. Pese a tener cualidades positivas, era incapaz de ver el valor que tenía. Cuando crecí y empecé a aplicar esta teoría en mi vida, empecé a darme mi lugar, a poner límites y respetarme, algo que los demás también hicieron”, relata.

Hábitos y rutinas

Una mujer de alto valor incorpora una serie de hábitos y rutinas que la distinguen. En su día a día prioriza el cuidado personal.

En cuanto al aspecto físico, puede incluir una rutina de cuidado de la piel adaptada a sus necesidades, la práctica regular de ejercicios que disfrute, como yoga o caminatas, y una alimentación equilibrada que nutra su cuerpo. Además, podría dedicar tiempo a actividades que le proporcionen alegría y relajación, como leer, escuchar música o disfrutar de un baño tranquilo.

En la esencia misma de la vida humana, la idea de ‘valor’ es personal y subjetiva. Pero al dar un nuevo sentido a nuestras vidas, logramos estar capacitados para crecer en este mundo que nos rodea y conecta. Como si al hallar un significado personal, no solo enriqueciéramos nuestra propia sensación de valía, sino que también nos abriéramos a entender mejor nuestra conexión con todo lo que nos rodea en este vasto universo.

Cleopatra y su legado histórico

Cleopatra, la emblemática figura femenina conocida por su amplia inteligencia política, toma de decisiones audaces y compromiso con su pueblo, podría ser considerada una de las primeras mujeres de alto valor. ‘Memorias de Cleopatra’ es una novela histórica escrita por Margaret George, publicada por primera vez en 1997. 

La autora se sumerge en la vida de la última reina de Egipto, resaltando cómo aquella figura personificó aspectos esenciales de fuerza, resiliencia y determinación que siguen siendo relevantes en la concepción moderna de las mujeres empoderadas. Este ejemplar se considera actualmente una guía de empoderamiento y determinación, ofreciendo una perspectiva más matizada y humana de Cleopatra, alejándose de la imagen tradicional de una mujer seductora y astuta.

¿Quieres leer más contenido de calidad y sin restricciones? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!