A los 41 años, la comunicadora Kathiuska Peralta dice sentirse plena, feliz y renovada. La pandemia fue la excusa para redescubrirse y hacer cambios no solo en su vida, sino además en su programa Sintonizados. El espacio que inició hace una década salió de la radio para unirse a la tendencia de informar, a través de las redes sociales.

El enfoque que le dio tiene que ver con el comportamiento humano y para ello entrevista a figuras mediáticas que hablan de un tema que han vivido, como la depresión, haber superado alguna enfermedad, la sororidad, lo cual sea un aprendizaje para quienes lo escuchan.

Después de una década, ¿por qué decidiste cambiar el programa?

Luego de 10 años de ser un magazín radial donde tuve la oportunidad de entrevistar a artistas nacionales e internacionales, decidí hacer un cambio y digitalizarlo al cien por ciento.

En qué momento te das cuenta de que era tiempo de renovar el enfoque.

Cuando terminé mi master en PNL (programación neurolinguística). A mis 40 años hubo una transición y renacimiento muy hermoso para mí y en base a eso dije, mi vida en redes sociales ha tomado otro giro sin extremos ni restricciones. Tengo una comunidad hermosa que me sigue, sobre todo mujeres que se identifican conmigo y dije que iba a aprovechar esto de acá para hacer un Sintonizados diferente.

Cómo han tomado tus seguidores este cambio.

Estoy en la etapa prueba-error. Van 4 capítulos en los cuales hablo del comportamiento humano. Por ejemplo, con Dayanara se tocó el tema de la sororidad y el ‘hate’ en redes sociales; Pedro Ortiz, de su fuerza de voluntad que lo llevó a bajar 150 libras y así con otros personajes. Son temas que hemos elegido para conversar acerca de lo que han vivido. Todos tenemos una historia qué contar. Siempre vemos la meta, pero no lo que ha pasado en el camino. Son nuevas experiencias.

Estuviste también en televisión. Lo último que hiciste fue Divinas, en Canal Uno, de ahí saltas a la radio y te quedaste.

Pasé por 4 emisoras. Sintonizados arrancó en Estrella, luego en Tropicana, La Bruja y finalmente, Élite. Siempre alquilé espacio. Cuando estuve en Canal Uno, dije que tendría mi programa de radio y toqué algunas puertas. Fue complicado recibir respuestas. No es como algunos piensan que porque uno es medianamente conocido, te van a decir ven para pautarte y no es así. Tengo clientes que tuvieron conmigo 10 años. Gracias a Dios a todos les agradecí y salí por la puerta grande.

¿Por qué la pandemia fue de gran ayuda para redescubrirte?

En el 2020 entré a un taller invitada por la psicóloga Carol Obando que me cambió la vida. Yo era una mujer muy insegura, tenía baja autoestima, que estuvo trabajando en eso. Ahora puedo decir que soy una mujer que sabe poner límites. Me di cuenta de que quienes no lo hacen, no se valoran. Y en el taller descubrí que lo necesitaba. En el 2016 llegué a pesar 160 libras, empecé a cuidarme y ahora estoy en el mundo de lo saludable.

Qué te empujó a cambiar, a hacer algo por ti.

Cuando me di cuenta de que necesitaba que me validen, tal vez porque estaba en ese mundo de cómo te ven, y dejé que la parte banal se llevara eso de la mujer que debe amarse tal cual es. En mi vida sentimental fue igual, como no me amaba lo suficiente, no le podía exigir a un hombre que me ame, si yo no me amaba. Ahora, no necesito que nadie me venga a validar o que me diga que linda estás, porque yo sé quién soy.

Amores y soledad

Además de insegura, eras muy celosa.

No soy celosa como lo era antes. Con el temperamento uno nace, pero el carácter se forja, y yo puedo decirte que lo he forjado. Antes era sumisa, pero con mis parejas, no. Era brava. Pero, no podía decir que no. Aprendí a decir no, me costaba y ahora no lo puedo creer.

¿Por qué estás sola?

Terminé mi relación hace 6 años y subí mucho de peso. Sufrí de ansiedad y me dediqué mucho a comer, a beber, a no controlarme. Y estoy sola porque todavía no aparece esa persona que me complemente. No estoy buscando a nadie, tampoco estoy cerrada a nada. He conocido personas maravillosas. Tengo la pirámide de exigencias bien clara.

¿Cuáles son?

Quiero un hombre inteligente, con sentido del humor, que quiera mucho a su familia, que sea creyente, de ahí el resto me es indiferente. Creo que la inteligencia es prioridad y por sobre todo que sea buena persona.

¿Decepciones?…

En la parte amorosa no, pero debo de agradecer alguna tristeza que pasé.

Sus piernas

La parte de su cuerpo que más cuida, son sus piernas, de las que dice heredó de su mamá. Confiesa que de tener oportunidad de asegurarlas, lo haría. Para mantenerlas tonificadas y sin celulitis, trata de cuidar mucho la alimentación.

En sus redes sociales comparte con sus seguidoras su rutina de ejercicios y tiene un reto saludable llamado Fulminados pero feliz, que es su grito de guerra. “Cuando tienes disciplina puedes lograrlo todo”, asegura.