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Familia
¡Ámelo con todo y 'pelados'!
Toda persona merece un segundo chance en el amor, pero... ¿qué pasa si tu pareja viene con hijos? No los presione para que te acepten, ni caigas en las provocaciones en caso de que no te quieran
¿Solo o en ‘combo’? Esta interrogante seguro la has escuchado en los restaurantes de comida rápida, pero esta opción de escoger va más allá de los alimentos y llega hasta las relaciones sentimentales.
El término ‘combo’ significa que viene acompañado. Y en el caso de las parejas, se sobrentiende que llega con hijos.
El momento ideal para decir que se tiene vástagos es cuando uno se presenta ante otra persona, porque la maternidad y paternidad forman parte de la identidad del ser humano. “Eres papá o mamá. No es un oficio ni un pasatiempo, ni la descendencia es un objeto material con el que se cuenta y ya, como cuando dices ‘poseo una casa o un carro’”, señala Eliana Rodríguez, psicóloga clínica.
Por general, se crece con la idea del hogar tradicional como un ejemplo de una unión normal y feliz; sin darnos cuenta de que la relación perfecta no existe, lo importante es aterrizar, abrir un abanico de posibilidades y estar conscientes de que el romance es algo que se construye y debe alimentarse día a día, con hijos o sin ellos, expresa la orientadora familiar Teresa Saldarriaga.
EXTRATIPS
- Sé honesto con tus hijos y diles que hay una persona que estás conociendo o con quien estás saliendo. Preséntala como pareja cuando estés seguro de que es el ser con el que quieres formar un hogar estable. Antes de tomar la decisión conoce bien el perfil. Ten disponibilidad para responder las dudas que tus vástagos tengan respecto a esta nueva relación y al candidato.
- Sé paciente con los chicos, ninguna relación surge de un día para el otro. Apresurar las cosas, ser intenso por ganarse su aprecio, no ayuda. Los niños hasta los 8 años necesitan tiempo para comprender que hay otras personas acompañando a su papá o mamá como pareja.
- No reemplazas a nadie. Es importante que el chico no sienta que estás intentando suplantar el lugar de su padre. Que se dé cuenta de que serás un apoyo en la nueva familia.
- Que los chicos no te quieran o acepten no significa que son malcriados o malos. Hay que validar sus sentimientos, no tratar de simplemente cambiarlos porque sí. Demandará esfuerzo para comprenderlos y escucharlos, honestidad para responder y madurez para seguir viéndolos a pesar del rechazo. Incluso hay casos de celos. Por eso, no caigas en provocaciones y no te ofendas. Pero si no se logra una comunicación que le permita entender las razones, pregúntate: ¿por qué sostengo esta relación?, ¿quiero seguir con mi pareja? Si las respuestas son ambiguas o no hay muchos argumentos, mejor finaliza la relación.
- Respeta los espacios de los demás, fortaleciendo la comunicación, evitando discusiones, aceptando errores y celebrando logros.
- Fija reuniones familiares sin la nueva pareja. Que estas sean con sus hijos y personas de confianza. Procura hacer una retroalimentación. Pregunta: ¿Cómo ven esta relación?, ¿Cómo perciben a su enamorado?