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Los ciclistas saborearon una variedad de platos que prepararon los establecimientos participantes en esta edición.Amelia Andrade / EXTRA

¡Menos huecas, las mismas ganas!

Con tercera edición de ciclorruta homenajean a Guayaquil. Por el protocolo de bioseguridad se permitió la participación de cinco huecas.

Que la adversidad no ‘tire abajo’ un evento que apunta a ser parte de la tradición en las festividades de fundación. Con esa consigna se realizó el sábado último la III Ciclorruta Gastronómica, que consiste en visitar las huecas tradicionales de Guayaquil.

Este recorrido en bicicleta, donde se conjugan la comida típica, el deporte y la distracción, también es la oportunidad para homenajear a la Perla del Pacífico.

La propuesta, que nació en el 2018, está proyectada a incrementar de manera paulatina el número de locales anfitriones, con miras a promocionar la diversa gastronomía guayaca. También es la oportunidad de admirar el desarrollo arquitectónico de la ciudad.

El año pasado participaron 9 huecas, pero en esta ocasión solo estuvieron 5.

Esta vez fueron protagonistas los establecimientos: Corozo El Verdadero, Ambigú Café, La Herencia Manabita, La Culata y Dulcería La Palma.

La Empresa Municipal de Turismo puntualizó que una menor participación de locales obedece al protocolo de bioseguridad establecido por el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal y nacional, como miras a evitar una nueva ola de contagiados por COVID-19.

Lo que no varió en esta nueva edición de la ciclorruta fue el número de participantes: 250 ciclistas. Los protagonistas, entre familiares y amigos, se concentraron en la Plaza de la Administración (frente al palacio municipal), para luego efectuar un recorrido que comprendió parte del centro y norte de la ciudad, y que duró cerca de cuatro horas.

Jonathan Segura pedaleó junto a su perro Bikey desde el sector Los Rosales, norte de Guayaquil. Era la primera vez que participaba, y pese a las limitaciones por los protocolos, estaba emocionado por la experiencia compartida.

Jonathan Segura se estrenó en el ciclopaseo en compañía de su can Birkey.Amelia Andrade / EXTRA

Durante el trayecto, los ciclistas mantuvieron un metro de distanciamiento. A ellos se les tomó la temperatura y accedieron a kits de prevención ante el coronavirus.

En cada rincón gastronómico que visitaron solo se permitió el ingreso de grupos de 10 personas.

Miriam Herrera, propietaria de la picantería La Culata, preparó un ceviche de pescado curtido con limón.

Mientras Corozo El Verdadero ofreció platos que lo han hecho popular, como el encocado de pescado y bollos. La bienvenida la daba el mismo propietario del local, Daniel Corozo.

Uno de los organizadores del evento es Biker Club. Cristhian Sáenz de Viteri, dirigente de la agrupación ciclística, opinó que las trabas por la emergencia sanitaria no impedirán que le rindan “un merecido homenaje a la Perla del Pacífico”.

Los esposos Renato Calderón y Julia Viveros caminaban cerca del palacio municipal cuando se desarrollaba el ciclopaseo.

“Es verdad que será una celebración diferente, lo que no se pierde es la esencia del guayaco, alegre y optimista”, expresó Calderón, mientras observaba la partida de los ciclista con dirección al norte de Guayaquil.