Exclusivo
Actualidad

Un collage de imágenes del guardameta del Atlético Bucaramanga: su tatuaje, junto a su hijo y junto a su esposa.Cortesía

Amor con el lenguaje de la piel

Golero de Bucaramanga se tatuó una carta que le hizo su hijo, luego de la muerte de su esposa.

Había pasado casi mes y medio desde el fallecimiento de su esposa, cuando Luis Delgado encontró una carta que le había dejado su hijo Mathías, de nueve años.

El actual arquero del Atlético Bucaramanga, de Colombia, se echó a llorar. Y decidió tatuársela. La historia se volvió viral en redes sociales cuando el jugador compartió imágenes en su cuenta de Instagram, @luchodelgado31.

“Papá, yo sé que para ti es duro que estés sin mi mamá, pero yo siempre estaré contigo. Te amo papá, tú haces muchas cosas por mí y yo por ti”, es el texto que escribió el niño en una hoja de cuaderno, que acompañó con un dibujo de ambos.

“Me marca mucho la forma cómo pintó a su mami, como un angelito”, comenta Delgado en una entrevista exclusiva con EXTRA.

La historia

La esposa del golero, Tatiana García, había padecido cáncer desde hace seis años, tiempo en el que se aferró a la vida con mucho valor. “Cuando Matías tenía como dos o tres años supimos de la situación de mi esposa y ella empezó a perder cabello. Un día me fui con mi hijo mayor al entrenamiento y regresamos con la cabeza rapada. Le dijimos a Matías que era el corte de moda: calvos. Y él quiso hacerlo enseguida”.

Esa fue la manera en que como familia afrontaron la condición de Tatiana. Con el pasar del tiempo, con las medicinas, quimios y los tratamientos, el proceso fue asimilado por el niño y la familia hasta el 1 de junio, cuando perdieron la lucha. Tatiana falleció.

Una noche de julio, cuando Luis y Matías llegaron a casa, como a las diez, se percataron de las tareas del niño, una de esas era de inglés, área en que su esposa era muy buena. “Le dije a mi hijo que se vaya a dormir que yo me encargaba”, recuerda Luis.

La tarea fue terminada en la madrugada. Al acostarse, Delgado se encuentra con la carta de Matías. “La tomo en mis manos, la leo y automáticamente se me salen las lágrimas por ese dibujo tan hermoso que hizo, por esas palabras tan lindas dándome respaldo, dándome su apoyo y de una vez pensé en tatuarme ese dibujo, quería plasmar sus sentimientos, quería plasmar en mi piel sus dibujos”, dice el jugador, quien además tiene tatuados los nombres de sus dos hijos, Jean Franco y Mathías; un león, salmo 144. 1; la oración del padrenuestro y el rostro de su esposa.

Se plasmó un sentimiento puro

En sus doce años de plasmar imágenes en la piel, Erwing Amézquita Rueda no había tenido una petición tan peculiar y simbólica como la de tatuar una carta y un dibujo de un niño de 9 años.

Luis Delgado acudió a su estudio con una copia de la misiva que le dejó el pequeño Mathías, escrito con su puño y letra, en donde le expresaba su apoyo y una promesa: yo siempre estaré contigo.

“Fue una experiencia superbuena. Uno no siempre tiene la oportunidad de hacer algo tan representativo, tan conmemorativo como es plasmar los sentimientos de un pequeño hacia su padre”, expresa Amézquita, quien replicó el contenido de la carta en la pierna derecha del jugador.

Al tatuador de 31 años, que en sus genes lleva impregnado ese arte desde su padre, ‘Jamez de Girón’ -como lo conocen-, le parece un gesto digno de imitar y aplaudir lo que el arquero del Atlético Bucaramanga hizo en su piel, en honor a su hijo.