Una nueva desgracia mantiene a un niño, de 10 años, hospitalizado y luchando por vivir. En 2021 el bus en el que viajaba junto a su familia se accidentó y él resultó gravemente herido, estuvo internado tres meses. La noche del domingo, nuevamente, fue víctima de una tragedia, cuando una bala perdida entró por el costado inferior izquierdo de su cabeza y se alojó en su cráneo.

El infortunio que mantiene a sus familiares sumidos en la tristeza y desesperación ocurrió dentro de un parque, ubicado junto a la iglesia Virgen del Soto, en Callejón Segovia y la C, en el sector Cristo del Consuelo, suroeste de Guayaquil.

Freddy, su angustiado padre, relató que Andrés, el tercero de sus cuatro hijos, estaba jugando con otros niños, cuando llegó un sujeto en bicicleta, se paró en la esquina y comenzó a disparar al aire.

“Mi niño se asustó e intentó correr a la casa, en ese momento se detiene porque siente que algo le quemaba la piel. Su mamá, al escuchar los tiros, se dirigió al parque que está junto a nuestro hogar. Vio al bebe parado y en ese momento no se dio cuenta de que tenía una herida de bala porque no sangraba”, relató a EXTRA el padre del pequeño herido.

Sostuvo que a los pocos minutos su esposa se percató de que Andresito, como llaman de cariño a su hijo, comenzó a sentir dolor y que de la herida brotaba sangre.

“Los vecinos le aconsejaron que lleve al niño al hospital y una tomografía reveló que tiene una bala alojada en la cabeza. Esta es la segunda operación a la que será sometido, hace un año nos accidentamos cuando íbamos en un tour hacia Playas. Confió en que mi hijo le ganará la batalla a la muerte”, manifestó con esperanza el progenitor.

Por su precaria situación económica y porque recién hace seis meses consiguió empleo como guardia en una camaronera, sus hijos no han podido estudiar.

Cansados de la inseguridad

Blanca Moreno, quien tiene más de 50 años residiendo en esta zona, expresó su preocupación por la delincuencia en la ciudad. “No es posible que los delincuentes ya no respeten el parque y la iglesia, en qué país vivimos, las autoridades no hacen nada”, cuestionó.

Otro morador, Alfredo Baldeón, solicitó a la Policía más patrullajes en el sector, “especialmente en estos días en que se celebran las fiestas en honor a la patrona de la iglesia, donde ocurrió la balacera”.

Estado crítico

El coronel Henry Herrera, jefe de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida y Muertes Violentas (Dinased) Zona 8, explicó que en el lugar del suceso la Policía encontró 4 indicios balísticos, calibre 9 milímetros.

“El menor se encuentra en estado crítico y su pronóstico es reservado. Tiene una herida en el cráneo, esperemos que pueda recuperarse”, indicó el oficial de la Policía.