Una noche de fiesta terminó en tragedia en el norte de Quito. El 30 de marzo de 2025, en una vivienda del sector El Condado, fue hallado el cadáver de Joffre Darío Sisa Manobanda, de 28 años, con una herida mortal en el cuello provocada, posiblemente, por una tijera. Horas más tarde, su conviviente, Michelle Benítez, contemporánea a él, fue detenida como sospechosa por la Policía y ahora enfrenta cargos por presunto asesinato.

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La audiencia de calificación de flagrancia se desarrolló el 31 de marzo, en la Unidad Judicial Penal con competencia en infracciones flagrantes, del sector La Mariscal. La jueza Geovanna Palacios calificó de legal la detención de Benítez y aceptó el pedido de la Fiscalía de dictar prisión preventiva, tras considerar que existen elementos que justifican su presunta participación directa en el crimen.

El sector del suceso

Una noche de alcohol y aparentes contradicciones

Según se relata en el acta de la audiencia, la noche del 30 de marzo, Benítez y Sisa —junto a su hijo menor— habrían asistido a una reunión familiar en la que consumieron bebidas alcohólicas, pero luego habrían extendido el festejo con más tragos, incluyendo cinco cervezas y una botella de pájaro azul, un licor artesanal. Luego se habrían trasladado a la vivienda donde ocurrió el crimen.

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La versión de Benítez fue aparentemente imprecisa y confusa. Afirmó no recordar con claridad lo sucedido porque había bebido en exceso y que fue su hermana menor quien la ayudó a acostarse. Indicó que, al despertar al día siguiente, encontró a su pareja sin vida junto al sillón, cubierto de sangre. Aseguró que no discutieron ni hubo agresión, y sugirió que el responsable podría haber sido algún conocido, incluso mencionando que la víctima habría sido integrante del grupo criminal Los Lobos..

Sin embargo, los elementos recabados por la Fiscalía supuestamente contradicen esta versión. La autopsia determinó que la causa de muerte fue una herida profunda con arma cortopunzante (posiblemente tijera hallada en su poder), con hemorragia interna. También se hallaron excoriaciones en el cuello, signos de posible confrontación, y máculas de sangre en el dormitorio, la pared y en una chompa atribuida a la procesada, quien dijo que esas manchas eran suyas y que estaba sucia porque no había lavado la prenda desde hacía un mes.

La publicación de un allegado por la dolorosa partida

Prisión preventiva para sospechosa de asesinar a su pareja 

La jueza acogió el pedido de la Fiscalía de dictar prisión preventiva con base en el artículo 534 del COIP, al considerar que existen indicios suficientes de una muerte violenta, que el hecho es grave, y que otras medidas no garantizaban la comparecencia de Benítez al proceso. Además, se valoró que la acusada presuntamente no colaboró desde un inicio. El caso seguirá en etapa de instrucción fiscal durante 30 días. 

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