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Pareja obtuvo el récord Guinness al ser confirmada por tener la mayor diferencia de estatura
Él mide apenas 1.09 m, mientras que ella, 1.66. Aquello no fue impedimento para que se enamoraran, casaran y formaran una familia
Una pareja británica alcanzó el Récord Guinness luego de ser confirmada por tener la mayor diferencia de altura en el mundo, casi 57 cms entre ellos.
James Lusted, de 33 años mide apenas 1.09 m, mientras que su esposa Chloé, maestra de 27, 1.66 m. Sin embargo, aquello no fue impedimento para que, en 2012, se enamoran luego de que amigos en común los presentara en un pub. Con estos datos consiguieron el récord en la categoría “matrimonio de diferentes sexos, con la mujer la más alta”.
En diciembre de 2013 decidieron mantener una relación amorosa, y siete meses después James, quien es actor y presentador, le propuso matrimonio a Chloé en una cita junto a un lago en el norte de Gales. La boda fue en 2016.
El matrimonio fue como siempre ella lo soñó, con todos sus amigos y familiares. "Nos casamos en la iglesia en la que se casó mi hermana, así que continuamos con la tradición. Fue mucha gente, una gran celebración, exactamente lo que yo quería”, relata la mujer.
Lusted tiene una forma poco común de enanismo conocida como displasia diastrófica, y admite que esto le hizo preguntarse muchas veces si alguna vez encontraría a alguien con quien enamorarse y compartir su vida.
Cinco años después, de la relación nació una hija que hoy tiene 2 años llamada Olivia y dicen que con la llegada de la nena están “viviendo un sueño”. “Tener hijos simplemente cambia tu vida, es brillante”, dijo James.
En declaraciones a Guinness World Records y a las emisoras nacionales, afirmó que, “llegué a un punto en el que tuve que decirme a mí mismo que el enanismo no me pertenece. Solo quería ser igual a todos los demás y simplemente quería vivir mi vida a lo grande, en un cuerpo pequeño”.
La pareja no solo ha conseguido establecer su relación, sino que además logró volverla mundialmente conocida con la obtención del récord.
Chloé sañaló que, “nuestra historia de amor nos ha enseñado, y ha enseñado a otros, que no se puede juzgar un libro por su portada y amar a la persona sin importar quiénes sean”.