Los dolores de cabeza comenzaban a atormentar a Antony Neira a la hora de estudiar. Sentado frente a la computadora, para recibir sus clases virtuales, el ‘pelado’ hacía un gran esfuerzo porque comenzaba a ver borroso.

Joselyn Lindao, su mamá, decidió llevarlo a una consulta donde el especialista. El resultado no fue nada bueno: a sus 8 años, Antony fue diagnosticado con hipermetropía (dificultad para ver de cerca) y astigmatismo (problema de refracción que provoca visión borrosa).

La oftalmóloga cuenta que a sus consultas en OpticC, la óptica donde labora, actualmente se presentan con mayor incidencia dos tipos de casos derivados de esa permanencia ante los equipos tecnológicos: el ojo seco y el astigmatismo miópico.

“El uso exagerado del sistema visual por más de 8 horas, al estar frente al computador y el celular todo el tiempo afecta al ojo. No se producen las lágrimas suficientes para mantener al ojo lubricado”, explica la especialista.

A ello se suma el reflujo de aire que genera la mascarilla, lo que desestabiliza la película lagrimal, afectando la evaporación del fluido.

Ocurre en personas de toda edad, precisa la oftalmóloga. “Y entre los síntomas a tomar en cuenta están la picazón, visión borrosa, dolores de cabeza o cansancio en la vista”, afirma.

La miopía también es otro de los deterioros visuales que ha ganado espacio durante la época de confinamiento prologado

Al respecto, el optometrista Tito Picón Torres señala que “el poco tiempo que pasan al aire libre y la frecuencia con la que miran pantallas en el interior en vez de disfrutar de actividades iluminadas por la luz del día” es una de las causas de esta silenciosa afectación.

¿Qué hacer? 

Humedecer

Para casos leves o momentáneos de resequedad ocular, los especialistas aconsejan el uso de lágrimas artificiales, a fin de darle un poco de humedad, y parpadear frecuentemente.

Lentes

Además, es conveniente el uso de gafas con filtro de protección UV y/o el uso de lentes con filtro de luz azul para evitar que la calidad de la lágrima disminuya.

Parpadeo

Cada 20 minutos debe realizar pausas de 20 segundos y mirar a unos 6 metros para ‘relajar’ el ojo. En este tiempo debe parpadear constantemente y al finalizar cerrar los ojos por unos segundos.

¡Quietas, manos!

No se toque ni refriegue para nada los ojos, cuando sienta cansancio visual o alguna molestia. No se haga más daño de esa manera, advierten los especialistas.