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Crónica roja

En el Cementerio General de Atacames sería enterrada la menor.EXTRA

Niña asesinada en Atacames iba a entrar a clases el 2 de mayo

Ella iba a cursar segundo de básica. La pequeña fue víctima colateral de la balacera suscitada el 29 de abril, en los exteriores de un bar

A Lupita, de 5 años y 10 meses, ya no la verán sus ‘profes’ en el regreso a clases. Su reencuentro con sus maestros y compañeros de aula, en el segundo año de educación básica, estaba previsto para este martes 2 de mayo. Pero, tristemente, este no va a poder darse porque la pequeña fue asesinada el 29 de abril, en un ataque armado en el sector en el que vivía con sus padres.

La menor, a quien su familia recuerda como alegre y soñadora, está en la lista de las víctimas mortales del atentado en un bar del barrio Nueva Esperanza, en Atacames, sur de la provincia de Esmeraldas.

Según el testimonio de Jacinto Z., padre de la menor, él, su esposa y la pequeña Lupita habían salido a merendar a una pizzería ubicada a tres cuadras del sitio donde ocurrió la balacera.

Ellos, antes de regresar a su casa, decidieron pasar comprando una gaseosa en una tienda ubicada junto al local de diversión donde ocurrió el ataque armado.

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No habían terminado de comprar su bebida cuando empezaron los disparos. “Íbamos a la casa, no estábamos haciendo nada fuera de lo normal”, recordó Zambrano.

Lupita era la menor de las tres hijas de Jacinto Z. y Patricia G., padres que imploran que se haga justicia. “Es injusto que le hayan arrebatado la vida así, tenía toda una vida por delante”, expresó Jacinto.

La madre de la menor también esperaba ser atendida, pues ella tenía un proyectil en su pierna. Hasta el cierre de esta edición, no había sido retirado.

El ataque lo habrían cometido sujetos identificados con Los Gangsters, quienes habrían llegado a buscar a integrantes de un grupo delictivo rival (Los Tiguerones) que se encontraban libando dentro del local, informó Fausto Buenaño, comandante de Policía de la Zona Especial 1.

El sepelio de Lupita debía realizarse la tarde del 1 de mayo en el Cementerio General de Atacames, después de una serie de inconvenientes que tuvieron los padres para retirar el cuerpo del Centro Forense de Esmeraldas. 

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