La esposa e hijos de un taxista que fue hallado sin vida dentro de su vehículo buscan que se esclarezca el caso. Aseguran que alguien lo asesinó.

William Pallo fue encontrado muerto en el asiento del conductor, la madrugada del viernes 3 de mayo, en la Lucha de Los Pobres Alta, en el sur de Quito. Según el informe de los policías que llegaron a atender la emergencia, era una “muerte por determinar”.

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En redes sociales se hizo viral una publicación en la que se leía: “reportan asesinato de un taxista por robarle”. Sin embargo, horas más tarde, desde la cuenta oficial de la Policía Nacional, en X (antes Twitter), indicaron que: “tras la autopsia practicada, su muerte fue por atragantamiento”.

Esto puso a dudar a la esposa del taxista, quien indicó que al siguiente día, cuando le entregaron el acta de defunción, en el documento constaba que la causa de muerte fue por “obstrucción de la vía aérea. Asfixia por sofocación”.

Otra duda que surgió y por la que cree que asesinaron a Pallo fue que el día del hallazgo le habían robado el celular, el dinero y la radio del vehículo.

Por si fuera poco, cuando quiso retirar el taxi de los patios de la Policía Judicial, le habían indicado que no lo puede hacer hasta que culminen las investigaciones. “Averiguamos a un abogado para que nos ayude con el trámite y nos quiere cobrar 1.000 dólares”.

EXTRA fue al sitio en el que hallaron el cuerpo y este queda a pocos metros de un retén policial que se encuentra vacío.

El dueño de una tienda que queda al frente comentó que a las 05:30 de aquel día llegó para abrir el negocio y vio que el taxi estaba encendido con una persona adentro. Luego de unos minutos, su prima, quien tiene una carnicería, fue gritando a su negocio a decirle que había un hombre muerto dentro del taxi.

El tendero se acercó al carro y vio a Pallo con el rostro morado y los brazos torcidos. Él llamó al ECU 911. Según el morador, los policías que llegaron y vieron a la víctima indicaron que lo habían escopolaminado.

El dueño de un billar contó a los agentes que el taxista estaba acompañado de dos mujeres y un niño durante la madrugada y que le habían comprado un par de bielas a las 02:00. La esposa de Pallo contó que el celular del taxista recibía llamadas hasta el otro día de su deceso. “Les pedí a los policías si me podían ayudar a rastrearlo y no me ayudaron”.

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