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¡Qué malditos! Dentro de un taxi pirata una mujer fue violada por cuatro hombres en Guayaquil
La víctima, médica y de nacionalidad venezolana, tomó un carro en los exteriores de un centro comercial. No conformes con robarle y golpearla, los sujetos la ultrajaron en reiteradas ocasiones ¡dentro del mismo auto!
Fueron las dos horas más aterradoras de su vida. Cuatro hombres arremetieron salvajemente en contra de su integridad y no se conformaron con robarle sus pertenencias, sino que también la golpearon y violaron una y otra vez.
La víctima de este brutal suceso ocurrido la noche del sábado es una venezolana, de 27 años, médica de profesión y radicada en el Puerto Principal desde hace más de un año.
Al salir de su trabajo en un centro comercial del norte de Guayaquil, ella tomó un taxi informal para que la trasladara hasta su domicilio en una ciudadela del norte. Confiada en que iba a llegar sana y a salva a su hogar, se sentó en uno de los asientos posteriores y tomó su celular para chatear, sin percatarse de que el vehículo que la trasladaba tomaría otra ruta con dirección a un parque, donde se embarcaron otros dos individuos. Ahí comenzó su odisea.
Tras insultarla, dos sujetos, en complicidad con el chofer, se subieron al carro. Uno se ubicó en el asiento del copiloto y otro junto a ella.
“Me subieron la mascarilla a los ojos y me dijeron que baje la cabeza, que si hacía algo me mataban. Podía escuchar que tenían algo con corriente, me quitaron el dinero que había cobrado recién. Uno de ellos, a quien le decían Jefe, me golpeó en la cara”, indica la afectada en la denuncia colocada en la Fiscalía del Guayas.
Como tenía tapados los ojos, desconoce la ruta que tomaron para en el trayecto, y sin detener la marcha del carro, ser violada en repetidas ocasiones.
Sin embargo, su pesadilla no terminó con el ultraje de los tres individuos, pues un cuarto tipo se subió al vehículo después y cometió la misma acción, mientras le apuntaban con un arma de fuego.
“Me amenazaron que si denunciaba lo sucedido me iban a matar, no sé dónde me dejaron, solo sé que caminé por una cuadra larga y comencé a pedir ayudar”, relata en su denuncia la extranjera.
Finalmente fue auxiliada por un señor, pudo llamar a un allegado y juntos acudieron a la Fiscalía para asentar la denuncia, la cual fue receptada por violación.
Las secuelas dependen de los factores y hay que tomar en cuenta su condición psicológica anterior a la violación”.Jenny Lara,
psicóloga
Ayuda psicológica
La fiscal Yoli Pinillo, coordinadora de la Unidad de Violencia de Género, explicó que tras recibir la denuncia de la víctima se solicitó que las cámaras de seguridad del mall donde tomó el taxi la chica y de la Corporación de Seguridad Ciudadana sean revisadas, pero estas “no aportaron con la indagación porque están deshabilitadas o no funcionan”.
La funcionaria aconsejó a la ciudadanía no tomar vehículos en las calles y de ser necesario fotografiar la placa del carro y enviársela a un familiar.
Jenny Lara, psicóloga del Centro Ecuatoriano para la Promoción y Acción de la Mujer (Cepam), coincidió con Pinillo. “No podemos ser confiadas. Una de las medidas es compartir la ubicación en tiempo real para que una persona cercana vaya siguiendo la ruta”, sostuvo.
La experta dijo que por tratarse de un ultraje sexual es necesario que la joven reciba valoración médica y psicológica. “Los primeros tres días estará en shock por el choque emocional, también es importante que reciba asesoramiento judicial”, sentenció.