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Al procesado supuestamente intentaron agredirlo al término de la audiencia.Edgar Romero

Del hospital a la cárcel

A conviviente de mujer fallecida por explosión en Daule le dictaron prisión para investigarlo por femicidio 

Para investigar un presunto femicidio, el juez Wilner Valencia Rodríguez dictó prisión preventiva en contra de Marcos Mora Pérez, a quien le dieron el alta tres días después de haber fallecido su conviviente Génesis Talía Jiménez Guerrero.

Ambos se hallaban hospitalizados en la ciudad de Guayaquil por quemaduras que sufrieron durante una explosión en su vivienda ubicada en el cantón Daule.

Al término de la audiencia, los agentes de la Dinased tuvieron que pedir refuerzo a sus compañeros del servicio preventivo del Comando dauleño para poder sacar a Mora, ya que los amigos y familiares de la víctima mortal, con carteles en manos y con los ánimos caldeados, querían hacer justicia por su cuenta.

Tras amurallar la puerta de ingreso al juzgado, los agentes sacaron rápidamente al procesado en una camioneta para trasladarlo al Centro de Privación de Libertad de Guayaquil.

Minutos antes de este suceso, el padre de Mora fue supuestamente agredido a golpes por hombres y mujeres amigos de la fallecida, cuando salía de la Defensoría Pública, por lo que tuvo que intervenir la policía para controlar los incidentes suscitados en pleno centro del cantón y que terminaron a dos cuadras de la dependencia judicial.

Según contó a EXTRA un familiar, el domingo 12 de julio de 2020, Génesis, de 27 años, junto a su hija, de 2, y su conviviente resultaron quemados tras una explosión que presuntamente fue provocada por este último, en su domicilio ubicado en la ciudadela Marianita 4, de Daule.

Un allegado de la fallecida testificó que el procesado la llamó hacia la cocina y luego le habría lanzado alcohol al cuerpo para quemarla a propósito.

Génesis Jiménez murió la mañana del sábado 25 de julio. A él le dictaron prisión el martes 28. La niña aún batalla por salvar su vida en una casa asistencial de Guayaquil.

No contaba penas por amenazas

A decir de Jhon Alfonso Jiménez Guerrero, su hermana, por celos, era constantemente maltratada por su cuñado.

“No la dejaba salir, él estaba pendiente todo el tiempo de ella porque hasta la ubicación le pedía de dónde se encontraba. Era una persona que quería controlarle la vida totalmente, ella no quería denunciar los maltratos porque, al parecer, estaba amenazada de que le iba a quitar a los bebes, por eso nunca denunció nada. Por una psicóloga de Guayaquil, que era amiga de mi hermana, nos hemos enterado de todo esto”, contó el deudo. (ERS)