A pesar de desplegar 1.219 policías y metropolitanos en Guayaquil, el objetivo de proteger a estudiantes y docentes en el regreso a clases en la Costa, no se logró. Ayer, mientras autoridades de Gobierno anunciaban un plan de seguridad para escolares en el Puerto Principal, criminales asaltaron a mano armada una escuela particular del noroeste de la ciudad.

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Armados y encapuchados, sujetos ingresaron a una escuela particular en la cooperativa Balerio Estacio con la intención de hablar con algún directivo de la institución y exigir dinero a cambio de paz.

El hecho generó indignación y preocupación entre la comunidad educativa, especialmente entre los padres de familia, quienes cuestionan la efectividad del plan de seguridad implementado.

“Se suponía que Guayaquil estaba extremadamente monitoreada”, expresó Mauri Mora, madre de un estudiante del colegio fiscal Simón Bolívar. “Por semanas se habló de esa seguridad que se viene demandando desde 2023, y aun así se metieron criminales a extorsionar. ¿Se dan cuenta de lo vulnerables que estamos? A los delincuentes no les importó nada”, lamentó.

Mora exige a las autoridades tomar medidas más contundentes para garantizar la seguridad de los estudiantes, tanto en escuelas públicas como privadas. “El Gobierno ha prometido un retorno seguro a los estudiantes, a todos. Y evidentemente se equivocó. Ha sido un primer día de alertas, no de calma”, enfatizó.

Más de 300 planteles a nivel nacional han sido priorizados por la Policía Nacional, de los cuales 38 de 12 distritos educativos tendrán atención especial de la Policía Comunitaria. Así lo anunciaron las autoridades de Gobierno ayer durante el acto oficial efectuado en la unidad educativa Los Vergeles, en el norte de Guayaquil.

El evento se desarrolló en medio de un amplio operativo de seguridad alrededor y dentro del plantel, por la presencia del presidente de la República, Daniel Noboa, y las ministras de Educación y del Interior, Alegría Crespo y Mónica Palencia.

“Vamos a tener un regreso a clases seguro con ingreso y salida de los estudiantes con vigilancia de la Policía Nacional. Vamos a tener 456 servidores en esas zonas priorizadas, pero también en las zonas no priorizadas muchísimos servidores que nos van a dar un total de 3.526 servidores policiales al servicio de la seguridad en la educación”, expresó la ministra Palencia.

El presidente Noboa destacó que en cinco meses de gobierno se redujeron los índices delictivos y se recuperó la confianza de la población en la Policía y las Fuerzas Armadas. En contraste, recordó que el año lectivo anterior terminó con pedidos para adelantar el fin de clases debido a la ola de violencia.

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