La fiesta que había en una vivienda de la ciudadela Álamos Norte, en Guayaquil, terminó cuando en el exterior se escucharon varios disparos. Los tiros fueron dirigidos hacia un hombre, quien también habría participado de la parranda. Sin embargo, no vivió para contarlo. Murió de inmediato.

El suceso ocurrió pasadas las 06:00 de este domingo 23 de junio del 2024. Previamente, durante la madrugada, todo era algarabía en aquella casa. Se oía música, risas y un ambiente de juerga.

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“En esa vivienda ya venían haciendo fiestas, tienen tiempo así. Toman, beben”, comentó una moradora, quien prefirió no ser identificada por temor a represalias. Dijo también que en ese domicilio había decenas de personas.

En un garaje interior había un auto convertible, mientras que afuera estaban estacionados un vehículo todoterreno color amarillo y un sedán blanco, ambos de alta gama.

Una fuente policial ratificó que en esa vivienda se realizaba una fiesta y que en el inmueble había muchas botellas de bebidas alcohólicas. “Al escuchar la balacera, todo el mundo salió huyendo de esa casa. Dejaron botado todo y luego no había nadie”, indicó.

También confirmó que las detonaciones se produjeron fuera del domicilio, pues en la vereda y en la calzada encontraron restos de proyectiles.

La víctima recibió ocho disparos en todo el cuerpo, según pudieron constatar los agentes que acudieron al sitio para investigar el caso.

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El difunto era de nacionalidad venezolana, pudieron conocer los gendarmes, pues todos los familiares que se acercaron al sitio para confirmar su muerte son del mismo país.

Se busca identificar a los implicados en el hecho a través de la revisión de cámaras de la zona. Aunque, según comentaron moradores a los policías, los autores del crimen se movilizaban en motocicleta.

Una hipótesis de lo sucedido es que haya sido un ataque dirigido exclusivamente al hombre, pues todos los tiros fueron contra el extranjero. Ni siquiera cayeron en vehículos que estaban cerca. También se sospecha, aunque con menos probabilidad, que la balacera haya estado relacionada a un asalto contra el chamo.

Al menos cuatro personas llegaron al sitio para ver de cerca el cadáver. Dos hombres y una mujer se acercaron brevemente al cuerpo para acariciar al ciudadano, mientras lloraban. 

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