Es una nueva etapa de vida tras décadas de jornadas laborales, pero no debe implicar el encierro en casa o el sedentarismo. Los adultos mayores, sean jubilados o afiliados activos, tienen una alternativa en al menos 17 talleres gratuitos de diversas áreas y opciones, que les permiten mantener una actividad física y mental de manera lúdica, saludable y acorde a su edad.

Estos cursos se desarrollan en los Centros de Atención al Adulto Mayor (CAAM) del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS). Están dirigidos a todos los afiliados, jubilados y beneficiarios de montepío que tienen desde 55 años de edad.

“Es algo magnífico para las personas mayores que ya cumplimos la etapa laboral. Aquí obtenemos recreación, conocimiento, habilidades, nuevas amistades. Verdaderamente es de mucho apoyo para tener otra visión de esta nueva etapa de vida”, dice Lourdes Ampuero, quien se integró a estos talleres hace dos años, tras jubilarse.

“Esto nos ha ayudado a todos para no tener una vida sedentaria en casa, porque a más de venir a hacer ejercicios que nos ayudan a prevenir enfermedades, nos ayuda a liberar el alma, a liberar los problemas que cada uno puede tener en su hogar y a no sentir un abandono”, agrega el también jubilado Marco Idrovo, quien desde hace cinco años asiste a los cursos en el CAAM ubicado en la ciudadela Huancavilca, en el sur de Guayaquil.

En estos días, este espacio recibe a unos 500 participantes, pero tiene capacidad para al menos 1.000, según afirma Anahí Galecio, responsable de estos centros en las Zonas 5 y 8.

En Guayaquil, el más grande está situado en la ciudadela Bolivariana, vecina de la Universidad de Guayaquil, donde también existe disponibilidad para unos 300 participantes adicionales a los 1.000 actuales.

Hay otro menor en el Hospital del Día Efrén Jurado, en las calles Eloy Alfaro y Argentina; y otro en el dispensario Letamendi, situado en las calles Lorenzo de Garaicoa y Letamendi. Todos reciben a los adultos mayores de 08:00 a 12:00; excepto el de la Bolivariana, que lo hace hasta las 17:00.

Los interesados se pueden inscribir a lo largo del año en cualquiera de los centros, según su preferencia o cercanía geográfica. Los requisitos son: una fotocopia de la cédula, certificado de las últimas vacunas recibidas y una foto tamaño carnet.

Si la persona que va a inscribirse tiene algún problema de movilidad por lo que necesite un acompañante o tutor, debe llevarlo para conocerlo. Uno de estos casos es el de la jubilada Aurora Lavayen, quien tiene 85 años y camina apoyada en un andador metálico y acompañada de una hija, que fue quien la inscribió hace solo dos semanas.

“Yo tengo artritis y estoy haciendo un tratamiento, pero estos movimientos físicos me ayudan a relajar más”, expresa.

Los talleres que ofrecen los CAAM en Guayaquil

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