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Juan Carlos Morán (izq.) es uno de los pequeños empresarios que recurren al coworking en la UTEG.Miguel Canales / EXTRA

Más allá de las clases

El COVID-19 dio la pauta para que entidades de estudios superiores pongan la mirada en servicios que amplíen su cobertura, como gimnasios y coworking.

Paralelamente a las clases virtuales, entidades de estudios superiores concretan propuestas como valor agregado para los alumnos. Son servicios que ayudan al universitario a continuar en su formación académica y laboral, e incluso aportan en lo físico y mental

Un ejemplo es la Universidad Tecnológica Empresarial de Guayaquil (UTEG), que durante el confinamiento diseñó un espacio que contempla un proceso de reactivación comercial, enfocado a la innovación.

Se trata de Incubadora de Empresas, Emprendimiento y Afines (Ideea), centro de coworking (espacio de trabajo compartido) donde se establecen sinergias entre emprendedores, pero en áreas independientes. El edificio está situado en Urdesa central, norte de Guayaquil.

Una de las pequeñas empresas que funcionan allí está relacionada a soluciones de negocios. Ocupa una oficina con dos escritorios.

Para Juan Carlos Morán, uno de los socios, el espacio es ideal para sus operaciones comerciales y proyectos.

El ITB cuenta con un gimnasio. Está situado en el campus La Atarazana.Christian Vinueza / EXTRA

Mara Cabanilla, rectora de la UTEG, indica que Ideea resultó del análisis de aristas que se presentaron por la COVID-19, como el cierre de negocios al no resistir la recesión económica. También el poco interés de invertir en la renta de pequeños y grandes locales, ante la necesidad de emprender desde casa.

Vicente Buenaño, coordinador de Ideea, destaca que brindan su servicio incluso a quienes no son alumnos. Cree que marcarán un hito en el ecosistema de la innovación, ya que apoyan con ponencias magistrales.

La Universidad Politécnica Salesiana (UPS) apuesta por “grupos de asociacionismo”, para fomentar la cultura, el arte y el deporte. También hay espacio para el taichí, canto, danza, oratoria y teatro.

Juan Pablo Salgado, vicerrector de Investigación de la UPS, sostiene que para la institución y su modelo educativo es fundamental que los alumnos crezcan y se eduquen en grupos.

“El fin es que la formación sea integral. Además de lo formal, en estos grupos se juegan valores, inquietudes y deseos para poder construir proyectos de vida”, remarca Salgado.

Una de las propuestas del Instituto Superior Universitario Bolivariano (ITB) es el gimnasio que habilitó en su campus de La Atarazana, norte de la urbe.

Las instalaciones cuentan con 60 máquinas entre caminadoras, aparatos para trabajar la musculatura y bicicleta estática. Incluso, hay espacio para bailoterapia, boxeo, spinning y crossfit.

El administrador del centro del entrenamiento, Gabriel Proaño, señala que el sitio está listo para acoger a personas de bajo rendimiento físico, a quienes les brindan servicios de nutrición y fisioterapia. Eso sí, los usuarios deben cumplir con los protocolos de bioseguridad, como disponer de dos toallas, usar la mascarilla y desinfectar los equipos.