La foto de Luisa González y Andrés Arauz sobre una torta era lo más llamativo. Estaba dentro de un salón del Hotel Quito en la capital, donde los coidearios de este exbinomio presidencial de la Revolución Ciudadana (RC) esperaban los resultados de la segunda vuelta, tras los comicios de este domingo 15 de octubre. 

 Muy por delante del pastel se levantó una tarima a la que González y Arauz llegaron luego de conocer que habían perdido ante Daniel Noboa y Verónica Abad, los nuevos presidente y vicepresidenta, respectivamente, del partido ADN.

Aún así, los vítores inundaron aquella sala en la que se esperó más de tres horas para un pronunciamiento oficial del dúo político que alcanzó un poco más del 47 por ciento de los votos totales de los ecuatorianos.

Sin embargo, las caras ‘largas’ no podían disimularse mientras González subía a la tarima. “Soy una mujer de fe y primero quiero dar gracias a Dios”, aseguró para luego dirigirse a Arauz, quien se mantuvo en silencio y esbozando una forzada sonrisa frente a todos.

La excandidata dijo que junto a él se tomaron muy en serio el proyecto político para tratar de llegar hasta el sillón presidencial de Carondelet. Luego el discurso continuó con una ‘cadena’ de agradecimientos que incluyó a la gente que caminó al lado de ambos políticos, de las autoridades seccionales, de los dirigentes del partido...

Una llamadita

Aplauso tras aplauso y grito tras grito, González se dio el tiempo para dar un abrazo a todo el país, incluyendo a quienes no votaron por ellos y que gracias a su decisión ganó el candidato de su predilección.

Así, la política daba por sentado que ellos respetan la democracia que se vive en el país, sin la necesidad de llamar a incendiar una ciudad “ni hemos salido a gritar fraude”.

Apenas terminara de hablar aseguró que llamaría a Noboa para felicitarlo, aunque sea vía telefónica. Pero eso sí, afirmó que estarán pendientes de todo lo ofrecido por el actual presidente para que cumpla, como dar cupos a la universidad al 100 por ciento de estudiantes graduados de los colegios o subirles la pensión a los jubilados del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) al valor similar al del sueldo básico.

Sin casi nada más por decir, González aseveró que el mandatario de ADN tendrá un voto en la Asamblea por parte de la RC, pero “siempre y cuando” lo propuesto vaya en beneficio del pueblo.

Así, el discurso acabó, con abrazos entre sus coidearios que bajaron presurosos de la tarima para dirigirse a la salida. Atrás quedaron el bullicio, los aplausos y... el pastel enterito.