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Así fueron las tareas de rescate del cuerpo del dirigente fallecido.Patricia Oleas

Dirigente comunitario de Colta muerte en un derrumbe

Manuel León, de 56 años, quedó bajo una montaña de tierra cuando trabajaba para devolver el servicio de agua a sus vecinos en la comuna Santo Domingo de Ugshapamba.

A Manuel León, de 56 años, la muerte lo soprendió cuando realizaba tareas en beneficio de su comunidad, Santo Domingo de Ugshapamba, en el cantón Colta. Una montaña de tierra le cayó encima, y para cuando sus vecinos lograron encontrarlo, el hombre ya no tenía signos vitales.

Los comuneros relataron que León era un dirigente que trabajaba por la dotación de agua en el sector y trabajaba en la dotación del servicio, pues desde hace cinco días, las más de 50 familias que conforman el caserío, se habían quedado sin este recurso necesario.

"Revisaron toda la tubería y en este sector ha estado rota. Pidieron una máquina al municipio, solo cuatro (personas) estaban trabajando, así se quedó en la sesión", contó José León Rea, otro dirigente.

Al principio hubo un pequeño deslizamiento que tapó a otro de los trabajadores, un joven de 25 años, a quien inclusive con la ayuda del ahora fallecido rescataron con vida. "Tenía heridas, y se lo llevaron al Hospital de Colta" indicó un testigo.

Minutos más tarde fue el dirigente quien se vio afectado por otro derrumbe , pero  pesar de los esfuerzos de habitantes del sector y personal de bomberos de Colta, nada se pudo hacer por sacarlo con vida.

Mucha gente se aglomeró en el sitio del derrumbe, donde llegó la Policía para hacer el levantamiento del cadáver..Patricia Oleas

Agentes policiales de los servicios de Criminalística y Dinased, junto a los de la Fiscalía realizaron el levantamiento del cuerpo, mientras los hijos y otros deudos lloraban ante la desgracia. Recordaban en voz alta y en Kichwa la vida de León, quien era agricultor y activista comunitario por largo tiempo.

 "Siempre trabajó por sacar adelante a su gente", aseveró Manuel Cunispuma, presidente del Gad de Santiago de Quito, parroquia a donde corresponde la comunidad afectada. La víctima deja siete hijos en la orfandad.

El cuerpo fue llevado a la morgue de Riobamba para la necropsia de ley y luego entregado a sus familiares para trasladarlo hasta Ugshapamba donde le darán el último adiós como dictan sus tradiciones.