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Los sospechosos fueron aprehendidos en la misma vivienda donde se produjo el crimen. Esta casa fue inspeccionada por un grupo de agentes policiales.Fotos: Amelia Andrade / EXTRA y cortesía

Detenidos por asesinar a un hombre y arrastrar su cadáver en el centro de Guayaquil

Entre los capturados hay un menor de edad. ‘Cayeron’ en la misma casa donde se produjo el crimen

La identidad del hombre asesinado y cuyo cadáver apareció abandonado el martes en las calles José Mascote y Piedrahíta, en el centro de Guayaquil, aún es un misterio. Lo que agentes policiales averiguaron es que habría sido un vendedor de drogas.

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El crimen fue comentado en esa zona de la urbe. Llamó la atención porque en la mañana en que fue encontrado el cuerpo, rápidamente empezó a correr un rumor inusual y tenebroso: que el cadáver había sido arrastrado desde una casa ubicada a una cuadra, en la esquina de avenida del Ejército y Piedrahíta.

“Mediante cámaras de seguridad se había visualizado que un sujeto sacaba un cadáver de un domicilio y posteriormente este cuerpo apareció tirado”, confirmó ayer el coronel Pablo Dávila, jefe policial subrogante de la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón).

Sus declaraciones respecto al caso las realizó para informar cuáles fueron los resultados de las acciones policiales llevadas a cabo después del hallazgo del cadáver.

De los cuatro detenidos, uno es menor de edad y también hay una mujer entre los aprehendidos.Captura de video

“La Policía Nacional se activó con sus unidades especiales haciendo el seguimiento de este caso. Se logró la captura de cuatro sujetos, los mismos que tenían que ver y participaron activamente en la muerte de este ciudadano”, detalló.

Los aprehendidos son un menor de edad y tres adultos. Estos últimos son una mujer de 43 años con antecedentes por robo, un sujeto de 29 años con procesos judiciales por tráfico de drogas y un ciudadano venezolano de 39 años.

La casa del 'terror'

Los sospechosos fueron aprehendidos en el mismo inmueble donde se produjo el crimen. Uniformados revisaron la propiedad y ahí encontraron a los presuntos implicados. Además, decomisaron como evidencias un carro y seis celulares.

Cuando apareció el ‘muertito’, moradores indicaron que en esa vivienda supuestamente era común el consumo de drogas. Una mujer que habita en ese domicilio dijo que el difunto era un adicto y que tuvo una riña con otra persona por el robo de una bicicleta.

Dávila dijo que se indaga si, efectivamente, allí se comercializaban estupefacientes y si la víctima mortal se dedicaba al microtráfico.

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