Lo ocurrido la noche de este sábado 21 de octubre, en el cantón La Maná, provincia de Cotopaxi, supera a cualquier película de ficción u horror. Dos hechos violentos se entrelazaron en un mismo lugar, la calle 19 de Mayo y avenida Tungurahua, en el centro de esta localidad.

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A las 19:00, este sitio fue el escenario de un linchamiento. Ciudadanos enardecidos y cansados de robos y extorsiones, golpearon y le prendieron fuego a tres individuos quienes, al parecer, habrían intentado atracar un local de compra y venta de joyas.

Tres horas después, mientras policías custodiaban y realizaban peritajes en el sitio, un patrullero, conducido por un sujeto sospechoso de haber violado a una mujer, se estrelló contra tres vehículos policiales.

Una fuente policial explicó a EXTRA cómo se registró el intento de robo a la joyería y lo que hizo su propietario para atrapar a los presuntos antisociales, quienes fueron sacados del negocio y quemados vivos.

“Los tres sujetos entraron a robar al establecimiento, el cual cuenta con vidrios blindados. El dueño, al darse cuenta de que iban a perpetrar esta fechoría, cerró las puertas, las mismas que son automáticas, estas solo se abren desde adentro. El señor logró salir por una puerta posterior, pero los tres pillos se quedaron encerrados. Luego alertó a la ciudadanía, abrió la puerta e hizo que la gente los saque a la fuerza y los lleve hasta la calle, allí los golpearon y los quemaron, dos fallecieron, uno quedó con graves lesiones”, reveló el investigador.

Los cuerpos de dos presuntos delincuentes, quienes, al parecer, también se dedicaban al delito de la extorsión, quedaron sobre la calzada con huellas de violencia e incinerados, mientras que su presunto compinche, Christian Steven Monsalve Viera, fue llevado hasta una casa de salud.

De acuerdo a la versión del médico que atendió a Monsalve, de 18 años, él presenta un trauma craneoencefálico, traumatismo múltiple en el cuerpo, una herida en el tórax por la incrustación de un objeto cortopunzante, posiblemente un cuchillo y se encuentra con pronóstico reservado.

“Cuando llegaron los policías, estos individuos eran rodeados por más de mil personas, los estaban linchando con palos, cuchillos, machetes, tubos y fierros, les daban con todo lo que tenían a la mano. También tenían gasolina, primero le prendieron fuego a la motocicleta, en la que se movilizaban, luego le rociaron combustible, los acusaban de extorsión y robo”, detalló el oficial de Policía.

Los uniformados pusieron en buen recaudo a Monsalve y a otro sujeto que al parecer también era su cómplice. “Asimismo, los querían ajusticiar. A ellos los golpearon con un objeto contundente. Uno fue llevado al hospital, el otro puesto a órdenes de las autoridades. Los que fallecieron en el sitio fueron trasladados a la morgue de La Maná”.

Casi a la misma hora, de este hecho y mientras dos cuerpos yacían sobre la calzada, otro suceso alarmó a la Policía y a los habitantes de la segunda urbe más poblada de la provincia de Cotopaxi.

“Una persona en estado etílico, al parecer, violó a una mujer; para consumar el delito sexual utilizó un cuchillo, con el cual amedrentó a la víctima, esto ocurrió en el sector El Portal de Jesús, vía a El Carmen”, narró el agente.

Perpetrado el hecho, el presunto violador huyó, pero policías que patrullaban el sector, al notarlo en actitud sospechosa, se estacionaron para hacerle un registro; en ese momento el sujeto, con el mismo cuchillo que amedrentó a la mujer, hirió al jefe de patrulla. “El conductor se bajó para auxiliarlo y este sujeto aprovechó para subirse a la patrulla y huir”.

El sospechoso, al intentar escapar, se impactó contra tres vehículos policiales que se encontraban en custodia de los cadáveres. “Fue detenido, no solo por el robo del patrullero, sino por herir a un servidor policial y agredir sexualmente a una mujer”.

El teniente coronel Iván Monteros Guerrero, jefe de la Policía de La Maná, indicó que cuando los uniformados llegaron, uno de los dos quemados, aún ardía y que producto de un machetazo le desprendieron un brazo.

El tercer presunto antisocial se salvó por la intervención de los policías, quienes pidieron a la ciudadanía que no haga justicia con sus manos, ya que serían las autoridades judiciales las que deberán juzgar su proceder. (AEB-DV)

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