Dos ciudadanos de nacionalidad colombiana fueron detenidos la noche del martes 8 de abril del 2025 en la intersección de la avenida Coruña e Isabela Católica, en el sector de La Mariscal, en el norte de Quito. La Policía realizaba patrullajes preventivos cuando observó una motocicleta sin placas con dos ocupantes que, al notar la presencia policial, intentaron escapar.

Los uniformados del circuito Mariscal interceptaron el vehículo y procedieron a realizar un registro corporal a sus ocupantes. En una mochila negra que llevaba uno de los sospechosos, de 25 años, hallaron varias fundas con sustancias de distintos colores que responderían a cocaína. 

¿Una nueva droga en la capital?

Había envolturas con un polvo rosado que se presume que pertenece a la conocida Tusi que es un tipo de droga que se ha vuelto popular en los jóvenes en los centros nocturnos, según la policía. Sin embargo, los agentes también les encontraron otra sustancia. Un tipo de polvo color rojo que no ha sido identificada aún. También tenían unas pastillas en forma de corazón y otras pepas crema. 

Además, a este último sujeto le encontraron una balanza digital, dos cucharillas metálicas con las que presuntamente colocaban las dosis de alcaloides en las envolturas y una radio de comunicación. Mientras tanto, el acompañante, quien tiene 28 años, también fue registrado y en los bolsillos de su  pantalón se le encontraron varias fundas con una sustancia vegetal de color verdoso, presumiblemente marihuana.

Ambos fueron detenidos en delito flagrante y los trasladaron al Subcentro de Salud del Comité del Pueblo para su respectiva valoración médica y posteriormente quedaron ingresados en la zona de aseguramiento de la Unidad de Flagrancia, donde se continuará con el proceso judicial correspondiente por el delito de tráfico de drogas. 

Investigan a los extranjeros

Según las primeras indagaciones de la Policía, los extranjeros pertenecerían a una organización criminal que se dedicaría al expendo de droga en zonas rosas del centro norte de la capital y también se investiga si ambos estarían involucrados en otros delitos que se han registrado por el sector en el que los capturaron. 

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Además, los uniformados interrogaron a los sospechosos del porqué tenían una radio de comunicación de dos vías, pero los aprehendidos se acogieron al derecho al silencio. Los agentes comprobaron que el dispositivo estaba en funcionamiento y presumen que con este se comunicaban con otros microexpendedores de estupefacientes de la zona para tener el control de expendio. 

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