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Aptas para enseñar
Cincuenta y dos instituciones acceden a la acreditación UEP 2020. Estándares de calidad en la docencia e investigación fueron parte de la evaluación.
Un total de 52 instituciones de educación superior (universidades y escuelas politécnicas) han logrado acreditarse y alcanzar los parámetros de cumplimiento establecidos en el modelo de evaluación.
Las entidades acceden a la mención UEP 2020 (Comisión de Universidades y Escuelas Politécnicas), válida para los próximo cinco años.
El pleno del Consejo de Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior (Caces) evaluó a 55 instituciones en estándares de calidad relacionados a la docencia, investigación y vinculación con la sociedad.
Tres entidades (ubicadas en Babahoyo, Esmeraldas y Quito) no alcanzaron la acreditación y deberán presentar un plan de mejoramiento por un período de hasta dos años, que contará con el acompañamiento de delegados del Caces.
Entre las universidades con la mención UEP están: Casa Grande, Ecotec, de las Fuerzas Armadas, SEK, Agraria, Andina, Central, de las Américas, de los Hemisferios y de Guayaquil. Mientras entre las politécnicas están: Salesiana (UPS), Nacional de Chimborazo, de Manabí y Espol.
Este proceso se desarrolló en cumplimiento del artículo 94 de la Ley Orgánica de Educación Superior reformada en agosto de 2018, que determinó que el Caces acreditará a las instituciones de educación superior, carreras y programas conforme lo establecido en esta ley y el reglamento expedido para el efecto.
El sacerdote Juan Cárdenas, rector de la UPS, indica que los proyectos de acreditación son práctica común, desde hace décadas, en varios países. “En Ecuador es un ejercicio relativamente nuevo, que surge como consecuencia de factores relacionados con la expansión de la matrícula, la multiplicación de centros de educación superior y los vertiginosos cambios económicos y sociales que exigen nuevas respuestas por parte de la educación superior”, remarcó.
Sin embargo, el funcionario recuerda que la institución que dirige ha sido valorada desde las diferentes ópticas por organismos anteriores al Caces.
“Lo que nunca debemos descuidar es nuestra misión institucional; solo ello posibilitará enfocarnos en la visión que nos proponemos. Si tenemos claridad en la identidad, no importa el modelo de evaluación que se implemente, lo importante es nuestra conciencia de lo que somos y de lo que queremos ser”, sintetizó.
Para Mara Cabanilla, rectora de la Universidad Tecnológica Empresarial de Guayaquil (UTEG), la acreditación significa liderar el sistema de educación superior y haber crecido como institución, “desarrollando nuevas metodologías y que el trabajo efectuado permita estar al nivel proyectado”.
Cabanilla puntualiza que la siguiente meta es la internacionalización, en donde puedan hacer investigación, vinculación y docencia. “Aquello nos permitirá efectuar intercambio de conocimientos entre universidades del exterior”, añadió.
En la misma ruta apunta Ecotec. “Proyectamos a las acreditaciones internacionales, de calidad, no solo institucionales, también especializadas por carreras o facultades”, señaló la rectora Gilda Alcívar.
Considera que la credencial es el resultado de un trabajo desplegado por la institución, “que consistió básicamente en demostrar que somos una institución organizada, que piensa en la calidad, que trabaja por procesos”.