Dos alumnas que vieron el ataque en el que uno de sus compañeros apuñaló a otro durante el receso de clases pidieron a las autoridades si pueden continuar sus estudios vía telemática.

(Te invitamos a leer: El misterioso caso de los ingenieros Carpio y Cerón en Mojanda: esta fue su última ruta)

Aseguraron que el adolescente que cometió la agresión las amenazó a ellas y a otros chicos que, si divulgaban fotos o videos de lo sucedido, les pasaría algo similar. El hecho sucedió la mañana del 20 de febrero de 2024 en un centro educativo ubicado en el sector de Itchimbía, en el centro de la capital.

La víctima y el agresor recibirán clases en su domicilio como parte de una de las medidas que se resolvieron al día siguiente en una reunión entre las autoridades del establecimiento y los padres de familia.

Sin embargo, el papá del adolescente apuñalado comentó que se estaría incumpliendo esta resolución.

La mañana de este jueves 22 de febrero, él acompañó a los padres de una de las chicas amenazadas para ingresar la solicitud que les permitiera estudiar desde casa y aseguró que ellos le contaron que los responsables del ataque a su hijo intentaron entrar a clases. “Habían ido como si nada, pero no les permitieron su entrada”.

El representante también fue al plantel para presionar a las autoridades para que entregaran los videos de la cámara de seguridad que está instalada afuera de la oficina de rectoría y que apunta a las canchas de vóley, donde sucedió el altercado violento.

Esta sería una prueba que pidió la Fiscalía durante la audiencia realizada luego de la agresión en la Unidad Judicial de Justicia Juvenil. Sin embargo, según el padre del afectado, “la vicerrectora indicó que esa cámara estaba desconectada”.

(No te pierdas: Esto es lo que se sabe del trágico accidente en la Simón Bolívar de Quito)

Sybel Martínez, abogada y directora del grupo Rescate Escolar, señaló que si bien en este caso actuaron con rapidez y cumpliendo con los protocolos para reaccionar a un acto de violencia, enfatizó que se debe trabajar en la prevención.

Para la jurista es necesario reforzar los departamentos de consejería de las instituciones educativas porque son ellos quienes pueden hacer un seguimiento de los ‘alumnos problemáticos’ según el entorno en el que viven o las prácticas que suelan realizar.

Martínez también añadió que existe un plan de erradicación de la violencia en el sistema educativo, pero que no se ha implementado aún.

Además, indicó que los establecimientos deben levantar información sobre la realidad que se vive en el interior y recomendó que “se debe incluir al crimen organizado como un componente de la violencia escolar para prevenir el delito”.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!