Guayaquil está atravesando una crisis en el transporte público debido a un paro iniciado por los transportistas locales el lunes 9 de septiembre de 2024, afectando a más de un millón de usuarios. La reducción en la disponibilidad de buses ha obligado a los ciudadanos a buscar alternativas de movilidad.

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La Federación de Transportadores Urbanos del Guayas (Fetug) ha indicado que el paro continuará hasta que el Municipio acceda a incrementar la tarifa del pasaje de 30 a 45 centavos.

Aunque la paralización ha reducido significativamente la oferta de transporte, algunas cooperativas han optado por reanudar sus servicios. La Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) informó, alrededor de las 10:00 de este martes 10 de septiembre, que ocho nuevas operadoras se han sumado a las catorce que ya prestaban servicio en diferentes zonas de la ciudad. 

Por otro lado, la ATM también comunicó a través de su cuenta en X el inicio de un nuevo proceso sancionatorio contra cinco operadoras que han interrumpido el servicio:

El alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, calificó la situación como un acto de "terrorismo" y declaró que no negociará con quienes atentan contra el bienestar de la ciudad.

El paro ha afectado gravemente la vida cotidiana de los ciudadanos, especialmente en el ámbito laboral y académico. Muchos guayaquileños han optado por taxis para desplazarse, pero los altos costos los hacen inaccesibles. Sonia Caicedo, una residente del norte de la ciudad, expresó su frustración al no poder pagar los 10 dólares que le cobraban para trasladarse a su lugar de trabajo.

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