Para apelear el hambre, después de 44 kilómetros de recorrido desde Ambato, en Baños de Agua Santa una comitiva se preparó para tenerles refrigerio a los más de 60 mil feligreses que se unieron a la Caminata de la Fe.

Las personas llegaron de Tungurahua y de diferentes partes del país. Solos, en familia o con sus mascotas.

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Iván Pallo llego desde Quito con su compañero canino 'Almohadín' a quien lo llevó muy abrigado para el largo recorrido.

Lucrecia López salió con su mascota 'Encanto' y su hija para el recorrido de más de más de ocho horas.

Durante toda la caminata hubo presencia de los agentes de seguridad y socorro como Policías, bomberos, Cruz Roja y personal de Tránsito.

Marlon Guevara, alcalde de Baños, recordó que esta peregrinación tiene más de medio siglo y a más de fortalecer la fe de los católicos, también incentiva la economía de los pequeños emprendedores en especial.

Se tenía prevista la llegada de unos 70 mil turistas solo este sábado 23 de marzo en Baños de Agua Santa, según el alcalde.

El refrigerio fue preparado por voluntarios de la Municipalidad que esperaron toda la madrugada a qué llegarán los feligreses y les dieron a cada uno un café caliente con un pan.

Los romeriantes, muchos acudieron hasta el santuario de la Virgen de Agua Santa y otros a relajar el cuerpo en las piscinas de aguas termales.

La caminata es la previa a Semana Santa que cada año organiza la Diócesis con el Municipio de Baños.

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