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En el cantón General Villamil, en la provincia del Guayas, hay dos espacios para disfrutar del mar en tranquilidad.Néstor Mendoza / EXTRA

Playas El Faro y El Pelado: Atractivos balnearios de Guayas para el descanso

En esta zona costera de la provincia del Guayas, les ofrecen ostras recién sacadas de la zona rocosa

Si su plan es pasear y, a la vez, descansar del ajetreo diario, las playas El Faro y El Pelado, en el cantón Playas, provincia del Guayas, son las opciones perfectas para usted. Estos sitios se destacan por su tranquilidad y belleza natural, ofreciendo un ambiente relajante junto al mar, a solo 5 kilómetros del centro de la ciudad.

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En la playa de El Faro, mientras se relajan, los turistas pueden probar unas deliciosas ostras frescas extraídas de las zonas rocosas de la playa.

La guayaquileña Marcela Ramos señala que tiene por costumbre comer ostras con limón. “Es un sabor único, por la frescura del crustáceo”, comenta la visitante.

Alberto García, uno de los 12 ostreros que, desde hace 30 años, se dedica a esta ardua labor, relata que las extraen de una profundidad de 2 o 3 metros. Ellos, a manera de buzos, permanecen bajo el agua durante tres minutos para lograr desprender los moluscos con una pata de cabra y llevarlos a la superficie.

Otro atractivo es el faro, considerado un símbolo del cantón y que se ha convertido en un punto de referencia tanto para locales como para visitantes. Esta estructura de 20 metros de altura sirve para que los operadores de barcos divisen la playa y eviten encallar, ya que es una zona rocosa y de acantilados. De ahí el nombre del sitio.

Estas playas son preferidas por unos turistas porque son tranquilas.NESTOR MEDOZA

En El Pelado puede acostarse en hamacas

A poca distancia se encuentra la playa de El Pelado, otro lugar ideal para el descanso.

Daniel Zambrano, quien llegó con su familia desde Portoviejo, provincia de Manabí, comenta que estas playas son perfectas para un verdadero descanso, ya que no hay ruidos; los turistas llegan, pero no de manera masiva. Mientras disfruta de una corvina en su salsa en una de las tres cabañas del lugar, que ofrecen comida hecha a base de mariscos, agrega: “Es el sitio ideal para relajarse”.

Hilda Mejillones, dueña de una de las cabañas, menciona que los turistas, después de comer, suelen descansar en las hamacas y luego se dirigen a bañarse en el mar.

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