El amanecer del pasado 4 de agosto trajo consigo una oscuridad que ha envuelto al tranquilo recinto de Estero Plátano en un manto de terror y desesperación. Edison Moreno Pérez, ex presidente del Gobierno Parroquial de Galera, y su esposa desaparecieron de manera violenta, arrancados de sus vidas cotidianas por un grupo de hombres encapuchados que llegaron por el mar como sombras y se los llevaron con rumbo desconocido a bordo de una lancha rápida.

(Lee además: Embajador de EE. UU. en Ecuador visita Esmeraldas, preocupado por criminalidad)

En la quietud de la madrugada, el hogar de la pareja fue violentamente irrumpido. Los secuestradores, sin piedad ni aviso, se abalanzaron sobre ellos, llevándolos hacia lo desconocido. Desde ese fatídico momento, ni una sola pista ha emergido sobre el paradero de Edison y su esposa, dejando a la comunidad de Muisne en un estado de miedo e incertidumbre.

El eco del secuestro retumbó al día siguiente, cuando los familiares, desesperados y sin respuestas, acudieron a las autoridades. La sospecha ha comenzado a carcomer los corazones de quienes conocían a Edison, quien se dedicaba a la captura y venta de mariscos al por mayor y menor.

En el pueblo se murmuran que se trataría de un secuestro presuntamente vinculado a una extorsión brutal. Las especulaciones sobre venganzas y cuentas pendientes flotan en el aire, mientras la angustia se intensifica con cada día que pasa sin noticias.

Han transcurrido 18 días desde que Edison Moreno Pérez y su esposa fueron arrancados de su hogar, y el silencio se ha convertido en una sombra pesada sobre Galera. La familia de los secuestrados ha optado por mantener silencio ante la opinión pública, temiendo posibles represalias.

Las autoridades continúan trabajando para resolver el caso y asegurar el bienestar de los desaparecidos, mientras la comunidad de Galera permanece en vilo, esperando noticias.

¿Quieres leer sin límites? ¡Suscríbete!