María Moposita no se recupera del susto. Fue ella quien encontró el cuerpo sin vida de un hombre en el sector de San Isidro, en la parroquia Pilahuín en Ambato.

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El hallazgo fue reportado el martes 16 de abril de 2024, pero hasta la tarde del 17 de abril no se conocía la identidad, según la Policía de la Subzona de Policía en Tungurahua.

Es la primera vez que la comunidad se enfrenta a la situación de encontrar un cadáver en esas circunstancias. Se sospecha que el individuo fue asesinado en otro lugar y luego arrojado en el sector.

San Isidro se encuentra en la vía que conecta Ambato con Guaranda. Una vez que la habitante informó a sus vecinos, estos acudieron a observar y alertaron a la policía.

El cuerpo fue trasladado al Centro Forense de Ambato, donde se espera que lleguen los familiares para identificarlo. Según los agentes de la Unidad de Muertes Violentas de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (Dinased), esperan que los familiares lo reconozcan por un tatuaje de un águila.

El hombre tendría entre 25 y 30 años. El tatuaje está en el omóplato derecho. Según los habitantes del sector, su cuerpo estaba completamente verde.

Amable Chaluis, presidente de las parroquias de Tungurahua, aseguró que se están organizando con más brigadas de seguridad interna para controlar la presencia de personas extrañas.

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