El próximo viernes 15 de marzo, se llevará a cabo una ceremonia significativa en el Coliseo de la Federación Deportiva Provincial de Napo, en el cantón Tena, donde 103 hombres indígenas de la Amazonía y 1 de la Sierra ecuatoriana recibirán sus diplomas como Servidores Policiales Técnico Operativos. La graduación simbólica, programada para las 10h00 am, marca el culmen de ocho meses de ardua preparación para los Aspirantes de la Escuela de Formación de Policías de la Subzona Napo.

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Esta cohorte diversa proviene de una variedad de pueblos y nacionalidades, con 81 miembros de la etnia Kichwa, 17 de la nacionalidad Shuar, 2 de la nacionalidad Awá, 2 de la nacionalidad Waorani, 1 de la nacionalidad Cofán y 1 Chibuleo de Ambato. Representan con orgullo a las provincias de Napo, Pastaza, Orellana, Sucumbíos, Morona Santiago, Zamora Chinchipe y Tungurahua, mostrando la riqueza cultural y étnica del Ecuador.

Durante su tiempo en la Escuela de Formación Policial de la Subzona Napo, estos aspirantes han sido sometidos a una preparación integral que abarca aspectos físicos, psicológicos y académicos, enriqueciendo así su capacidad para servir a sus comunidades de manera efectiva.

Destacando entre ellos se encuentra David Gilmar Licuy Aguinda, de 19 años de edad y perteneciente a la nacionalidad Kichwa, quien ostenta la primera antigüedad de la promoción. Los 104 Aspirantes también han completado cursos de especialización durante tres meses, incluyendo áreas como Inteligencia, Turismo, Policía Comunitaria, Grupo de Operaciones Motorizadas y Grupo de Intervención y Rescate.

Esta promoción lleva el nombre de "Cbos. Songor Tapia Verónica Mireya 2023-2024", en honor a Verónica Songor, una heroína nacional que perdió la vida en el cumplimiento de su deber en Guayaquil el 9 de octubre de 2022. Durante un ataque a la Unidad de Policía Comunitaria, Songor fue alcanzada por disparos y, en reconocimiento a su valentía, fue ascendida póstumamente de Policía a Cabo Segundo.

La graduación de estos 104 aspirantes indígenas no solo representa un hito en sus vidas individuales, sino también un paso significativo hacia una fuerza policial más diversa y representativa, comprometida con servir y proteger a todas las comunidades del Ecuador.

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