Los hechos de vandalismo que provocaron pánico y angustia en Esmeraldas, la noche del viernes 30 de diciembre de 2023, habrían sido solo una distracción para la fuerza pública, porque estos hechos habrían tenido como finalidad la impunidad en la brutal matanza de cinco miembros de una familia en el barrio Puerto Limón, del sector Bellavista Norte, en las riberas del río Esmeraldas.

Así lo informó este sábado 30 de diciembre el teniente coronel Líderman Hermosa, comandante subrogante de la Subzona Esmeraldas.

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Según datos de la Policía, fueron incinerados seis vehículos particulares y otros dos sufrieron quemaduras parciales. Por las pericias, se sabe que utilizaron combustible. 

Los carros afectados fueron escogidos al azar por los maleantes. Además, se registraron balaceras y robos en distintos sectores de la ciudad.

El oficial Hermosa explicó que, aproximadamente a las 19:00 del viernes 29 de diciembre, la Policía recibió la alerta del asesinato de cinco personas en un domicilio, además de tres heridos. Los fallecidos eran miembros de una misma familia, mientras que de los heridos, quienes fueron trasladados al centro de salud tipo C Las Palmas, se investiga si tienen algún parentesco o relación con los demás.

“Las cinco personas asesinadas son de sexo masculino y mayores de edad. Podríamos presumir que (los muertos) tienen relación con un grupo delictivo, pero nuestras unidades investigativas están desplegadas para determinar aquello. Hasta el momento no hay detenidos ni por las muertes violentas ni por la incineración de los vehículos”, manifestó el jefe policial.

En el barrio Puerto Limón, zona altamente conflictiva de la ciudad de Esmeraldas, sus moradores aseguran que vivieron momentos de terror al caer la tarde del viernes. Carlos (nombre protegido) recuerda que sujetos encapuchados y armados con fusiles llegaron a bordo de motocicletas, entraron a la casa y dispararon en contra de quienes estaban dentro.

“Al parecer estaban en una reunión y los tomaron por sorpresa. La gente se refugió en sus casas por temor a que se desate una balacera”, dijo Carlos.

La policía llegó al sitio pasadas las 22:00. En la casa solo estaban los cuerpos, los cuales fueron llevados al Centro de Medicina Forense.

Minutos después del múltiple asesinato se desató el vandalismo en el barrio La Primavera, en el sur de la ciudad, y terminó en el centro, en las calles Malecón y Piedrahíta.

Los hechos ocurridos de forma consecutiva y en cadena, en el lapso de dos horas, hacen presumir a la policía que se trataría de una estrategia para distraer a los uniformados y bloquear cualquier operativo en contra de los asesinos de la familia. (LCh)

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