Con abrazos y lágrimas recibieron a unos pasajeros de la empresa Alianza, que vivieron momentos de angustia durante su viaje hacia la ciudad de Cuenca, en la provincia del Azuay, desde Guayaquil, provincia del Guayas.

Entre los 24 pasajeros afectados están dos cuencanos que arribaron al aeropuerto José Joaquín Olmedo, tras dos semanas de vacaciones en Argentina. A ellos, los pillos les quitaron los pocos recuerdos que trajeron y sus objetos personales, durante el asalto registrado este jueves 18 de abril.

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“Veníamos tranquilos y en el sector de Durán fuimos interceptados por una camioneta y dos personas abordaron a la fuerza”, narró un afectado, quien prefirió reservar su nombre.

Los sujetos armados los amenazaron y los llevaron por un camino de tercer orden por cerca de 20 minutos. En medio de amenazas, les quitaron las pertenencias a todos los pasajeros y los abandonaron. Aunque llamaron al ECU911, no recibieron ayuda, indicaron.

Los afectados permanecieron en la zona por más de dos horas aguardando por asistencia. Ellos llegaron a Cuenca cerca de las 11:00 de este jueves 18 de abril de 2024.

Ramiro Abril, gerente de Alianza, informó que entre marzo y abril de 2024 seis furgonetas han sido asaltadas en la misma zona. Han presentado las denuncias, pero no hay ningún resultado de las investigaciones.

“Nosotros salimos desde las oficinas y sin realizar paradas. En el camino, la misma camioneta nos aborda y con armas de fuego someten a los conductores y les obligan a ir hacia las guardarrayas”, detalló. En esta ocasión fueron dos busetas las atacadas.

El día miércoles, uno de los choferes había logrado evitar ser asaltado mientras cubría la misma ruta, Guayaquil - Cuenca.

Patricio Chérrez, vicepresidente de la Cámara de Turismo de Azuay, señaló que los asaltos y ataques a las a unidades son constantes en el mismo lugar. Recordó que, el 9 de abril, una unidad turística recibió impactos de bala en un intento de asalto.

En otro intento de asalto, de igual forma, un conductor recibió un impacto de arma de fuego. Los dos agremiados indicaron que mantendrán una reunión con la jefa política para tomar acciones para reducir los ataques. Explicó que los conductores se sienten abandonados por parte de las autoridades y si la situación no mejora, paralizarán el servicio como medida de presión.

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