Gabriel Zambrano agonizó en el pasillo de la unidad número 15 de la línea RapiTrans de la capital. Su novia, Nancy Minango, lo escuchó decirle: “Negra, me muero”. La ambulancia tardó demasiado, dice la joven.

Minutos después de que la víctima fuera trasladada desde Cumandá, en el Centro Histórico de Quito, hacia una casa de salud, solo se confirmó su deceso.

La desdicha de Minango comenzó la mañana del jueves. Ella y su pareja, un comerciante de caramelos, tomaron un autobús en La Marín, centro de la ciudad. Al poco tiempo empezó una riña entre un pasajero y el controlador. Zambrano intervino y salió mal parado.

“El tipo que se subió le había dado al cobrador un billete de veinte dólares falso y le exigía que le diera el vuelto”, narra Minango.

El pasajero, un sujeto alto y delgado, se puso belicoso. “Lo insultó y agredió al ayudante del chofer. Ahí es que mi novio se metió. Le dije no lo hagas, pero insistía en que no es justo que le robara de esa manera”, explica.

Aunque fue el billete falso el pretexto que usó el atacante para hacer problema, Minango reveló las verdaderas intenciones del sujeto. “Lo que quería es robar a los pasajeros. Ya lo han sabido conocer por ahí”.

Durante los cuatro kilómetros que la unidad tarda en recorrer desde La Marín hasta la avenida 24 de Mayo hubo caos. “Ese hombre me golpeó también a mí. Estaba agresivo y lo apuñaló con un cuchillo grandote en las piernas”.

Minango aún se niega a creer su infortunio. Le parece un sueño. Con su novio compartía muchas cosas, incluso el ‘camello’ como comerciantes informales. “Él no le hacía daño a nadie. Lo mataron por comedido”, lamenta.

A traición

La central del ECU-911 notificó a la Policía del sector sobre lo ocurrido en el autobús. Agentes se contactaron con la víctima y se trasladaron a la escena. “El señor no dimensionó la gravedad de sus heridas. No pensó que iba a morir”, aclara Deybis Silva, jefe de Policía del Distrito Manuela Sáenz.

Lo que más le apena al uniformado es que la víctima fue atacada “a traición” cuando le dio la espalda al sospechoso.

“Ya había logrado que dejara la unidad y cuando se volvía a subir, el sujeto lo apuñaló en las dos piernas”, describe.

Al momento se continúa con las búsqueda del implicado. En el Centro Histórico lo conocen como Richard. Comerciantes aseguran que es un tipo violento.