Ardió en llamas y se redujo a hierros humeantes e inservibles. Fue un vehículo Kía con placas de Pichincha y que fue prendido fuego por una turba de nativos y vecinos del sector del ingreso a Carmen del Guzho, al sur de la capital del Azuay, por la vía rápida Cuenca-Azogues. El carro habría sido utilizado por un grupo de presuntos delincuentes que a eso de las 22:00, de este martes 7 de febrero, con armas de fuego, habían ingresado a robar a los clientes y propietarios de un restaurante del lugar.

“Nadie se mueva. Esto es un robo. Nos dan todo, dinero y celulares”, habrían gritado los sospechosos mientras empuñaban sus armas. Los sujetos no contaron con la reacción de uno de los propietarios del negocio, quien repelió disparando su arma de fuego.

Los malhechores se habrían asustado y de manera desesperada corrieron para salvar sus vidas, dejando el vehículo abandonado en la cercanías al local que intentaron robar.

Ahí los vecinos y moradores, enardecidos y entre gritos de advertencia de “muerte para los delincuentes”, prendieron fuego al automóvil, impidiendo incluso que personal de bomberos, que llegó a la emergencia, proceda a apagar el fuego.

Los agentes policiales, tras el incidente, montaron un operativo para dar con el paradero de los presuntos sospechosos, que, de acuerdo a datos proporcionados por la muchedumbre, habrían sido cuatro los sujetos.

"No creemos en la justicia. Todo ladrón atrapado será quemado", dijeron los moradores del Carmen del Guzho, mientras aplaudían el sonido del fuego que iba destruyendo el auto.