“Estoy rota, decepcionada, impotente y con odio de saber cómo puede existir esta clase de gente sin corazón”, expresó la modelo Mafer Vargas tras el asesinato de Narcisa Meliza Cardoso Giler o simplemente Dulce Narcisa, su amiga de hace 10 años.

Dulce fue baleada la mañana del lunes 5 de diciembre en la vía Perimetral, en el noroeste de Guayaquil, cerca del viaducto de La Prosperina, cuando iba en su vehículo, tras salir de un gimnasio, en donde estaba entrenando minutos antes con Vargas. 

“A veces entrenábamos juntas, ya que llegaba tarde y por lo general ella súper temprano. El último día que compartimos fue ese fatal día. Nos tocó hacer una rutina de espalda, el entrenador nos puso a entrenar un circuito. Ella terminó primero y se fue”, aclaró la modelo.

Mafer aseguró que se quedó hablando con el entrenador sobre unos productos que ese día le vendió para mejorar su rendimiento físico. Luego de eso conducía rumbo a su casa, cuando se percató que el carro de su amiga estaba detenido en la vía Perimetral.

“Lo vi subido al parterre. Paré, pensé que se había chocado. Había gente alrededor, por lo que bajé corriendo y veo que el vidrio tenía disparos. Me quedé en shock. Le dije a las personas que me ayuden, pero dijeron que ya habían llamado a la ambulancia. Me quedé pasmada, jamás imaginé algo así. Minutos antes, sonriendo, conversando y luego verla con su luz y brillo apagados”, contó la modelo de 31 años. 

Entiende que la noticia causó conmoción a nivel, pero pide respeto para su familia que en estos momentos está pasando por un momento difícil de afrontar.

"Fui a rendir versión del casi, al igual que los que estuvimos antes con ella, pero fue una versión del antes y el después. Cuando paso el incidente yo no estaba. Llegué cuando había pasado, no vi el suceso", finaliza.