Exclusivo
Judicial
Joven recibió siete puñaladas por "error" en Quito
La víctima contó que el tipo lo confundió. La esposa del acusado les habría pedido perdón y hasta les ofreció plata para que no denunciaran.
Pedro estuvo a punto de ser asesinado debido a una “equivocación”, asegura. El joven, de 22 años, fue apuñalado siete veces por un sujeto que habría estado buscando a otra persona para matarla, en Cotocollao, norte de Quito.
Una semana después del ataque, el afectado se recupera de las heridas en su espalda, pecho, brazos y piernas. Recostado en su cama, la víctima contó sobre la agresión ocurrida la madrugada del viernes.
“Estábamos afuera de la casa de un amigo y vimos que esta persona pasó en una motocicleta”. En ese momento no sospecharon nada.
Para paliar el frío, Pedro llevaba una chompa gruesa de color café. Los minutos pasaban y la charla con sus ‘panas’ se interrumpió cuando aquel motociclista regresó y se acercó.
“Preguntó por una persona. No recuerdo el nombre que dijo. Y luego se abalanzó sobre mí y gritó: ‘Te voy a matar’”.
Se salvó de milagro
Para fortuna de Pedro, el grosor de la chompa que llevaba hizo que el cuchillo se enredara, provocando que los cortes no fueran tan profundos. Ante la agresión, los ‘panas’ de la víctima retuvieron al tipo y lograron quitarle el arma.
En ese momento pasaba un patrullero policial y detuvieron al sujeto. Al tiempo, el joven se desvaneció. “Tuve suerte porque cerca de allí estaba un señor que trabajaba como paramédico y me atendió”.
Luego de unos minutos fue trasladado hasta un hospital del norte de la ciudad, donde le suturaron las siete heridas.
Entretanto, el detenido fue llevado a la Unidad de Flagrancia para que respondiera por el ataque. Allí, la mamá del afectado se topó con la esposa del detenido. “Esa mujer le rogó que le disculpáramos porque no me quería matar a mí, sino a otra persona”. Después les ofreció 300 dólares para que todo quedara en paz.
Lo liberaron
Pese a los ruegos, la familia de Pedro puso la denuncia por tentativa de asesinato. Pero las autoridades, cuando se realizó la audiencia, procesaron al implicado, de nacionalidad venezolana, por lesiones.
“Cuando me enteré, mi familia me calmó un poco diciéndome que, al menos, el acusado estaba preso”, contó Juana, la abuela de la víctima. Sin embargo, ese consuelo duró poco porque el venezolano fue liberado.
Según la Judicatura, Fiscalía no formuló cargos en contra del extranjero, por lo que el caso quedó archivado y solo como una investigación previa.
Ahora, Pedro teme que luego de hacer pública esta agresión, el tipo lo busque para, ahora sí, ‘darle el vire’.