En menos de cuatro horas los proyectiles ‘zumbaron’ en Guayaquil, pues se registraron tres hechos violentos que dejaron, por los menos, a dos personas heridas, según informes oficiales de la Policía Nacional.

El primer caso fue reportado aproximadamente a las 22:00 del sábado 7 de agosto de 2022, en la cooperativa Proletarios sin tierra, del Guasmo, en el sur porteño. Ahí, en la avenida 12 y callejón 53, un hombre identificado como Érick Gaibor fue baleado por un sujeto que, al parecer, había llegado a pie.

Según relataron los testigos a los investigadores, el criminal se dirigió directamente a la víctima. Por ese motivo, los agentes consideran que se trató de un hecho selectivo.

En la escena, los peritos de Criminalística recogieron cinco indicios balísticos de calibre 9 milímetros.

Más tarde, cerca de las 23:30, un hecho similar ocurrió en la cooperativa Nueva Granada, del Guasmo, pues algunos sujetos llegaron para disparar en contra de Cristian Pilaloa, quien al igual que Gaibor permanecía hospitalizado hasta el cierre de esta edición.

En el lugar del ataque, los especialistas hallaron nueve indicios de proyectiles, también de calibre 9 milímetros.

Finalmente, cerca de la 01:30 del domingo 8 de agosto, moradores de las ciudadelas Sauces 7 y Sauces 9, en el norte porteño, informaron a la Policía que un tiroteo se estaba registrando en la zona, cerca del edificio de Correos del Ecuador.

Cuando los agentes del Servicio Urbano llegaron hasta el sitio notaron que en la avenida José María Egas, un vehículo Kía Sportage, blanco, tenía la parte frontal incrustada en las barandas del cerramiento perimetral de un supermercado.

Al acercarse para revisar si había alguien dentro del automotor, los uniformados comprobaron que estaba vacío.

Algunos lugareños comentaron que vieron que un grupo de sujetos (sin precisar cuántos) huyó aparentemente a pie y que, al parecer, al menos uno estaba herido. No obstante, eso no pudo ser comprobado por los investigadores.

Para corroborar las versiones de los residentes, los agentes de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida (Dinased) tenían previsto revisar grabaciones de algunas cámaras de seguridad que existen alrededor de la escena del suceso, en la que fueron encontrados indicios de nueve proyectiles, calibre 9 milímetros.

El vehículo abandonado presentaba cuatro orificios ocasionados por balas.

Policía no utilizó grúa para traslado

Para trasladar el vehículo abandonado tras una balacera entre las ciudadelas Sauces 7 y Sauces 9, los agentes no utilizaron los servicios de una grúa, pues a pesar del mal estado del automotor, un uniformado lo condujo para trasladarlo a una unidad policial.

El vehículo tenía afectaciones en el sistema de dirección y mientras avanzaba no paraba de rechinar. Incluso, en uno de los giros, hubo riesgo de que impactara a un auto de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM), pero el conductor se detuvo y trató de enderezar su camino para continuar.

El carro en mal estado era custodiado por un patrullero de la Policía.