Exclusivo
Judicial

De este lado llegaron los asesinos que acabaron con el sargento.AMELIA ANDRADE

Guayaquil: Sargento de Inteligencia Naval esperaba sus alimentos cuando lo balearon

La víctima consumía una cerveza. Había pedido un plato de arroz con menestra y pollo. En otro caso, un hombre fue ‘quebrado’ en un asadero.

Eran aproximadamente las 20:20 del viernes 28 de octubre de 2022 cuando Carlos Enrique Figueroa Páez llegó a un restaurante ubicado en la esquina de las calles Lorenzo de Garaycoa y Brasil, en el sur de Guayaquil.

Saludó, caminó hacia una mesa en el interior, cerca de una barra con publicidad de licores, y pidió una cerveza, en espera de que le sirvieran un plato de arroz con menestra y pollo. Sin embargo, no lo pudo degustar, porque no pasó mucho tiempo hasta que dos individuos arribaron y acabaron con su vida, a tiros.

Según los testigos, los asesinos huyeron a bordo de un vehículo de tonalidad oscura, que habían parqueado junto a la acera al frente del local. Nadie los detuvo, porque el temor invadió a todos.

En la escena, los peritos encontraron cinco indicios de proyectiles: cuatro casquillos y una bala deformada.

Una persona que también estuvo en el sitio del ataque relató que la situación los sorprendió y que lo primero que la gente hizo fue correr. “En otras ocasiones han llegado para robar rápidamente a alguien en la vereda, pero nunca antes habían matado”, dijo con la condición de que mantengamos en reserva su identidad.

Además, explicó que los asesinos habrían atacado desde el exterior, a través de una ventana protegida con una verja. Al frente de esta se había sentado Figueroa Páez.

En el negocio, a él ya lo conocían de vista, porque había ido algunas veces a comer, por lo general en compañía de otras personas. Esta vez no fue así, pues llegó solo.

En el sitio nadie sabía la identidad de la víctima ni su profesión. Incluso, hubo quienes lo confundían con un tramitador que labora en una institución cercana.

Carlos Enrique era sargento de las Fuerzas Armadas y específicamente cumplía funciones en Inteligencia de la Fuerza Naval. Su reparto era el Puerto Principal, de acuerdo con fuentes oficiales.

En un informe preliminar del caso, al que Diario EXTRA tuvo acceso, se detalla que en una entrevista realizada por los investigadores a su pareja, ella habría comentado que la última vez que lo vio fue horas antes, cuando había pedido que le prestara su vehículo, sin comentarle cuál era su destino.

La mujer, incluso, habría hecho alusión a las actividades a las que se dedicaba el sargento de Inteligencia y habría comentado que, por el tipo de trabajo, estaba expuesto a situaciones de riesgo.

En los registros judiciales, Figueroa no tenía procesos ni detenciones.

OTRO CASO

En un asadero del sector Florida también se suscitó un hecho violento.AMELIA ANDRADE

Baleado y rematado en un asadero

A Óscar Stalin Morales Bartolomé, de 34 años, sus vecinos lo conocían como una persona tranquila, a la que le gustaba trabajar para conseguir el sustento para su hogar.

Por eso, comentaron que les sorprendió enterarse de que fue asesinado la noche del viernes, cuando laboraba de ayudante en un asadero de pollos en la cooperativa Unidad Nacional, del sector Florida, norte de Guayaquil.

Según los lugareños, los criminales se movilizaban en una moto y habrían rondado por varios minutos el local del asadero Gregorio. Y cuando vieron a Morales de pie en el ingreso, le dispararon y se alejaron de la escena, pero pocos segundos después regresaron y le volvieron a disparar.