Las despedidas tienen un sabor único y especial, por eso Roger Waters promete llevar a los ecuatorianos a un viaje sonoro y visual, en el que resaltará la espectacularidad técnica del show musical 'This it's not a drill' (Esto no es un simulacro, es español).

La gira del ‘adiós’ del exlíder y bajista de la banda británica Pink Floyd, tendrá este sábado su parada nostálgica en el estadio Olímpico Atahualpa de Quito.

Para los roqueros más ‘vetucos’, los que vivieron la época del rock psicodélico, sello de Waters y sus compañeros desde la década del 60, pero también de los más ‘nuevos’, los que se engancharon con el estilo progresivo, este show promete ser “espectacular”, calificado así por peruanos y costarricenses, quienes en esta última semana disfrutaron de conciertos en sus respectivos países.

Relatos que hilan historias en español irrumpirán en el escenario, como ha sucedido en sus presentaciones.

En Lima, cuando sonaba ‘Wish you were here’ , en la pantalla apareció la narración de Waters: “En la época de ‘Wish you were here’ me fue mal en mi matrimonio, así que estaba un poco inestable emocionalmente. Una noche cenando en la cantina de Abby Road, casi me pierdo. Era como mirar en la dirección equivocada. Yo estaba comiendo salchichas, huevos y frejoles con un tenedor sostenido por unas manos diminutas, en una mesa diminuta, con una banda diminuta. Estoy teniendo un ataque de nervios”.

Sobre el escenario del Atahualpa sobrevolará una oveja inflable gigante, mientras suene ‘Sheep’ del álbum Animals (1977), tema que critica la decadencia del mundo industrializado. La oveja luego se teñirá de rojo y por las pantallas, aparecerán imágenes de la oveja boxeando con capa roja contra la sociedad.

Repertorio musical

En promedio, Waters toca unas 24 canciones en cada presentación. Este sería el repertorio de la capital: ‘Comfortably Numb’, ‘The Happiest Days of Our Lives’, ‘Another Brick in the Wall, Part 2’, ‘Another Brick in the Wall, Part 3’, ‘The Bar’, ‘Have a Cigar’, ‘Wish You Were Here’, ‘Shine On You Crazy Diamond (Parts VI-IX)’, ‘Money’, ‘Brain Damage’, ‘Eclipse’, entre otras.

El show, a más de un potente repertorio musical, incluirá una pantalla impresionante, efectos láser, un sistema de sonido envolvente y una producción de gran relevancia.

Se empleará un escenario convencional con cuatro grandes pantallas. Habrá desarrollos escénicos y teatralidad, relacionados a los discos conceptuales de la banda.

Chris Kansy, el manager de producción del tour, ha dado ciertos detalles del montaje del espectáculo, el cual puede llevar hasta 12 horas, incluyendo transporte, instalación, ajuste de luces, alineación de cañones láser y verificación de que todo funcione perfectamente.

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