Pasó de no saber bailar a un vídeo que tiene cinco millones de vistas. Todo gracias a la magia de las redes sociales.

San José de Alluriquín, una parroquia de Santo Domingo de los Tsáchilas, en la vía que conduce hacia Quito, es un sector que está dividido por una carretera de dos carriles. Allí, los carros que pasan tienen la posibilidad de comprar dulces, melcochas, maní y ciertas bebidas ‘espirituosas’ de colores.

Ahora, Alluriquín pisa fuerte en el mundo de la red social TikTok. La más mediática del lugar es Jennifer Ortiz (@GatitaOrtizok), una guapa chica, estudiante de administración de empresas a quien la conocen como Gatita, debido a unos ojos divinos que brillan, electrizan y enamoran.

Su padre falleció cuando era pequeña y le ha metido ‘duro’ al trabajo con su mamita, quien tiene una fábrica de maní endulzado.

CAMBIÓ SU VIDA

A los 15 años comenzó a darle con todo al trabajo, al tiempo que estudiaba. En plena pandemia comenzó a vender en la vía. Todo iba de lo más normal, tenía sus cuentas en redes sociales, a las cuales les ‘paraba bola’ solo de vez en cuando.

Pero nadie sabía lo que se venía. Su cuenta en TikTok estaba ‘con polvo’. No le daba tanta atención debido a que veía que allí todos se meneaban, y según ella, no había nacido para bailar.

Pero un día de trabajo ‘flojón’, en que los carros no pasaban por la vía, aprovechó para tratar de bailar y hacer un tiktok.

“Lo hice a lo que saliera”, resalta. Luego subió el vídeo y siguió trabajando. Esto fue en el 2021. Y de pronto su celular comenzó a sonar y sonar.

Las visualizaciones, los me gusta y los seguidores comenzaron a sumarse. Ella no entendía nada, la fama le estaba llegando.

“Fue una locura, hice el vídeo y pensé que no iba a pasar nada. Es más, jamás soñé con ser famosa. Pero me llegaron los seguidores por miles, el teléfono explotó”, recuerda una emocionada Gatita, que cursa los últimos semestres de administración de empresas.

LLEGAN POR ELLA

El primer vídeo éxito lo hizo el 3 de mayo del 2021, donde se la veía con melcochas en la mano, vestida como gatita y con el fondo de la canción ‘Locuras mías’, de Silvestre Dangond. Ese vídeo pegó y registra 1 millón de vistas. Ahora su cuenta tiene más de 355.400 seguidores, más de tres millones de me gusta y tiene vídeos con cerca de 5 millones de vistas.

“Fue algo que me llegó de un momento a otro, en realidad nunca lo busqué, pero es lindo que la gente te quiera”, expresa Ortiz.

Gracias a esa inusitada fama la gente la conoce, y ahora muchos que pasan por la vía la buscan para comprar y saludarla.

“Es una locura, uno no sabe de dónde viene la gente. Un día una persona que venía del Oriente me buscó y gritaba ‘¿dónde está la Gatita Ortiz, dónde está?’. Y cuando salí, me dijo que solo por mí había venido, me saludó, compró bastante y se fue”.

LAS COSAS SERIAS

Gracias al TikTok la han contratado para promocionar varias marcas y ha viajado al extranjero.

Incluso hasta le han ido a ofrecer trabajo, pero lo suyo es el maní y lo que le enseñó su madre. “Les digo que gracias, pero ahora estoy trabajando en lo que será mi marca ManiGo, es decir Maní Gatita Ortiz. Sé que eso será mío y podría hasta dar trabajo”, cuenta segura de sí misma.

Yaunque la gente le dice que es guapa, ella tiene muy claro que eso es secundario, pues quiere que la destaquen como una persona a la que le gusta trabajar. Para tristeza de algunos, ella tiene novio.

Cuando vaya por Allurinquín verá a la chica del TikTok que endulza la vida con sus ventas.