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Fiorella Solines revela que se obsesionó con las carteras, al punto de crear una pequeña colección. ‘Huele’ las ofertas.Archivo / Extra

Fiorella Solines: La clave está en invertir en los básicos

Revela que se obsesionó con las carteras, al punto de crear una pequeña colección. ‘Huele’ las ofertas

Siempre viste al último grito de la moda. Fiorella Solines es un referente del estilismo. Sabe cómo y cuándo llevar una prenda, está al tanto de las últimas tendencias y ha sido invitada a las pasarelas más famosas del mundo.

(Lea también: Personaje: Fiorella Solines dice que ya no tiene espacio en su clóset)

Lo que muy pocos saben es que, aunque recorre Europa y América en busca de colecciones, esta periodista gasta muy poco dinero en ropa, ya que la mayoría se la regalan. Aunque su clóset está bien surtido, prefiere las marcas de buena calidad, duraderas y con etiquetas que muestran el porcentaje de material reciclado. Son marcas con las que está enganchada.

Fiorella Solines muestra su personalidad con su estilo de vestir.Daniel Tapia

Según su experiencia, lo esencial en todo armario son los básicos. “Inviérteles a los que se quedarán contigo toda la vida, a los que te permiten crear un clóset infinito, como un pantalón negro, unos jeans, una camisa blanca y un blazer. Siempre tengo camisetas de algodón”, aconseja.

Le encantan las carteras

Su vicio son las carteras, y no escatimaba en comprarlas. Cuando surgían trabajos con buenos pagos, solía apartar una parte del dinero para adquirir las mejores. Aunque ya no lo hace, todavía conserva varias carteras de alta gama que cuida por su valor.

Las carteras han sido mi obsesión durante los últimos 20 años, pero ya le he bajado un poco. Tengo una colección pequeña. Te puedes vestir como quieras, pero con una cartera te ves distinta. Se eleva mucho el look con los complementos”, detalla.

La más cara que posee es una Chanel clásica, cuyo precio no reveló. Esta prenda de lujo se la ‘regaló’ cuando fue imagen de una marca de productos para el cabello. “Ese fue mi mejor contrato. Dejé parte de lo que me pagaron para comprarme la cartera, que aún conservo. Han pasado 10 años, y su precio se ha triplicado”, relata.

‘Huequitos’ de ofertas

Fiorella conoce muchos sitios donde venden carteras a mitad de precio y aprovecha las ofertas de ventas privadas, con precios sorprendentes. En contraste con las carteras de alto precio, tiene varias compradas en Colombia. Estas son tejidas a mano y decoradas con chaquiras, y les tiene un cariño especial debido al valor del trabajo artesanal.

“Tengo nueve. Es una colección muy especial, porque amo el trabajo hecho a mano. Hay un gran esfuerzo detrás de las familias que llevan generaciones haciendo esto, y yo les doy mucho valor. Son las piezas más importantes de mi clóset. No son baratas, cuestan más de doscientos dólares”, comenta.

Ocho pares de ‘tacones de oro’

Respecto a sus trajes, Fiorella prefiere los diseños de talentosos diseñadores ecuatorianos como Ornella Lebed y Renata Merchán. “Sus vestidos son tan bonitos que me paraban en la calle”, cuenta.

Otro diseñador local que la vistió para los Grammy fue Eduardo Villamar. En cuanto al calzado, usa los famosos ‘tacones de oro’, creados por la ecuatoriana Jaqueline Moncayo. Tiene ocho pares. “Son mis favoritos, el tacón es dorado y los trabajan en pan de oro. Para mí, son arte, y tienen mucho valor por todo el proceso artesanal, ya que están hechos a mano”, explica la exjueza del programa ‘Yo me llamo’.

A diferencia de las carteras, los zapatos se deprecian, incluso los de diseñador, porque una vez que los pisas, pierden su valor. “No es algo que puedas heredarle a tus hijos, pero tengo algunos que uso en ocasiones especiales”.

Fiorella Solines revela que se obsesionó con las carteras, al punto de crear una pequeña colección. ‘Huele’ las ofertas.Archivo / Extra

Según Solines, los millonarios como Mark Zuckerberg (empresario, fundador de Facebook y CEO de Meta) se visten de manera minimalista, bajo el concepto del ‘lujo silencioso’, que implica no llevar ni mostrar logos, aunque las sencillas camisetas que usa, como las del dueño de Meta, sean de diseñador y cuesten 300 dólares. Esto contrasta con la logomanía, que se popularizó con el movimiento urbano y tomó fuerza como símbolo de estatus.

A todo lo que le das visibilidad se vuelve tendencia. De alguna manera, para poder vender, las marcas de lujo apuntan a la gente de clase media que quiere parecer de estatus alto. El mundo de las marcas de lujo ha crecido mucho gracias a las personas que las usan y las hacen famosas”, asegura Solines, quien mantiene su programa de moda en el canal colombiano RCN.

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