Sergio Yonfá Reyes guarda silencio. Él no quiere referirse a la denuncia que “por intento de femicidio” hizo en su contra Génesis Jaramillo Rosero, su expareja sentimental y madre de su hija, de 2 años.

Yonfá no responde a las llamadas. Pero mientras él calla, en las redes sociales se suman los comentarios y cuestionamientos de personas que dan cuenta de los supuestos abusos del exparticipante de los realities Combate y BLN.

El olvidado competidor volvió a la palestra pública acusado de golpeador. Génesis Jaramillo en su cuenta de Instagram denunció que, en la madrugada del domingo 24 de abril, Sergio Yonfá abusó física y mentalmente de ella. En su acusación adjuntó fotos de su rostro maltratado. “Con sus manos me fracturó los huesos nasales y el suelo óptico”, puntualizó.

Debido a la agresión, indicó que este miércoles 26 de abril se someterá a una intervención quirúrgica para ponerle tornillos en su rostro. “Yo no merecía esto, solo espero que se haga justicia”, reclama.

Pamela Ramón, amiga de Génesis, en su cuenta de Twitter publicó que por fin ella se decidió a denunciar “a su abusador” y, además, pidió justicia.

Consultada por EXTRA, Pamela confirmó que Génesis hizo la acusación no solo en redes sociales, sino también ante la ley. “La denuncia ya se puso, pero hasta el día de ayer (martes 25 de abril) no aparecía en la página de la Fiscalía”, señaló.

Además, se conoció que la joven tenía una boleta de auxilio en contra de su agresor.

La publicación de Jaramillo cuenta con más de 1.800 comentarios de personas que rechazan la violencia en contra de la mujer y de instituciones que están prestas a darle ayuda psicológica y legal.

“Cuando estaba en sexto curso él me invitó a ‘una caída’ con todo su grupo. Fui con unos amigos y terminaron golpeándonos y él me dio un puñete en la cara. Luego se justificó diciendo que estaba borracho. Fui testigo de su violencia en primer plano”, decía una de las publicaciones en la que le daban su respaldo.

“No te conozco, pero te creo. Él era novio de una chica de mi colegio y a ella también la agredió física y psicológicamente. Espero se haga justicia y pague todo el dolor que ha causado”, señalaba otra.

“Ojo, este agresor es íntimo amigo del otro agresor que golpeó al guardia de seguridad en edificio de Quito. Estos tipos se creen muy machos y hacen lo que les da la gana”, se leía en otro comentario.