Su divorcio no solo cambió su visión de la vida, sino que produjo un fuerte impacto en su carrera musical. Alexa Barruet indica que al no tener mayores opciones artísticas en el país, se fue a México, donde paso a paso construye su camino interpretando música de despecho.

Nacida en Pasaje, provincia de El Oro, empezó a los 12 años cantando en la orquesta de un profesor del colegio. A los 14 se casó y a los 15 fue madre, por lo que su esposo no quería que fuera artista y la limitó en sus sueños.

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“A los 28 años me divorcié y entré a cantar en la orquesta Amantes de la Paz, de Guayaquil. Ya hace siete años me hice solista porque quería que me identifiquen por mi nombre”.

Aunque sus inicios fueron en la música romántica, confiesa que no sentía lo que cantaba. “Yo quería expresar todo ese dolor, el desamor que sentía, y me incliné por las rancheras, la música del despecho y fusioné banda y mariachi”.

La primera canción escrita por ella fue ‘Mi cama tiene otro dueño’, con la que llegó a México.

“Con ese tema creían que era colombiana, porque ese género está muy pegado allá. Incluso hubo un medio en Santo Domingo que se negó a presentarme cuando supieron que no era de Colombia, en lugar de apoyarnos entre ecuatorianos. Ahí me di cuenta de que acá no había mayores posibilidades”.

Pero la oportunidad se le presentó cuando abrió el show del mexicano Marco Antonio Solís en Guayaquil, en el 2019.

“Víctor Morán es un músico de Solís. Al escucharme cantar me dijo que fuera a México y me echara un ‘palomazo’ (cantada), que me iría muy bien. Me recomendó un relacionista público y me fui”, recuerda.

Admite que esta aventura musical no ha sido fácil. “Hice gira de medios y me presenté en la feria de Texcoco, con ‘Mi cama tiene otro dueño’. La letra es fuerte y gustó”.

Una cama ganadora

Fue con ese tema que la Asociación de Locutores Radiales de México le otorgó el Micrófono de Oro, galardón que antes lo había ganado Julio Jaramillo. “Lloré tanto de la emoción. Dios es bueno y generoso, recompensa cada cosa que estoy haciendo”.

Asegura que en su canto refleja lo que es su vida. “Es muy difícil entrar a México. Voy de a poquito, pero cada vez pisando algo más fuerte, con perseverancia, disciplina y muchas ganas. Mi vida es una canción de despecho”.

De regreso por algunas semanas en Ecuador, Alexa promociona su canción ‘Diga la verdad’. “En México suena en las radios, pero me faltaba darla a conocer acá. Es un tema increíble, un himno para todas esas mujeres que quieren gritar lo que sienten”.

En sus planes tiene una colaboración musical con Jorge Cordero, exvocalista de La Banda Limón, y con el colombiano Luis Mateus.

“Se me han abierto muchas puertas, mi carrera está en ascenso. El que persevera alcanza y el que dejó de soñar se quedó dormido y no avanzó”, sentencia.

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